La Junta Departamento de Montevideo aprobó un proyecto de decreto de la Intendencia que establece cuotas para el nomenclátor capitalino: de cada 4 nombres de personas para calles, 3 deberán ser de mujeres.
A través de un comunicado la Junta expresó que se trata de una “acción afirmativa” que “pretende revertir la actual relación desproporcionada entre el nomenclátor masculino y femenino del departamento, mediante la visibilización y el reconocimiento de los aportes de las mujeres en la historia y en la construcción de la ciudad”.
Últimamente la Junta ha priorizado “la asignación de nombres de mujeres para nuevas calles, plazas y espacios públicos que hasta el momento carecían de nombre”, como forma de “compensar el desequilibrio en forma urgente mediante esta política de acciones afirmativas que va en consonancia con políticas similares” tomadas en ciudades como Madrid, Córdoba, Valencia, Barcelona, Rosario, entre otras.
En Montevideo el 93 % de las calles llevan nombres de hombres, “Solo 150 calles de un total de 5.700 llevan nombres de mujeres, lo que habla de un criterio histórico alineado con un orden social de supremacía de lo masculino”, señala el comunicado de la Junta.
Luego del debate sobre la cuotificación del nomenclátor montevideano, ésta se aprobó por 25 votos en 28.
Uno de los tres ediles que votó en contra fue Javier Barros Bove del Partido Nacional. “No me parece una buena medida establecer una cuotificación como forma de corregir” el desbalance, dijo. Destacó que “hay mujeres muy valiosas, mujeres que se merecen ser reconocidas, pero no por una cuota ni como una forma de compensación”.
Ante la existencia de más nombres de hombres que de mujeres en las calles de la ciudad, el edil dijo que eso ocurre porque por mucho tiempo “hubo pocas mujeres” vinculadas al proceso de formación del país y su independencia; “los constituyentes fueron hombres porque no había mujeres en el Parlamento” o las personas vinculadas a la trayectoria de Artigas eran mayoritariamente hombres.
Pero también hay casos como el nombre de Ana Monterroso de Lavalleja, “¿por qué se puso ese nombre con ‘de Lavalleja’?”, se preguntó. “Primero porque era un modismo de la época y segundo porque ella firmaba así, si su firma era Ana M de Lavalleja, ¿por qué lo cambiaríamos?, es como ella se identificaba. Hoy la mujer no firma ‘de alguien’ porque son ellas mismas, pero si se trata de una mujer que firma ‘de alguien’, bueno hay que ponerla como ella se identificaba”, razonó.
Destacó que en la historia del Uruguay “hay mujeres muy valiosas”, y que el número crece “desde 1930 para acá con sus conquistas sociales, las posibilidades de trabajar, mejorar el estudio, toda una lucha muy importante que ha dado la transformación de la sociedad y me parece brillante”.
Sin embargo en el marco de discusión sobre la cuotificación en el nombre de las calles “yo le pregunté al resto de los ediles, ¿cuántos de ustedes han propuesto nombres de mujeres?. Yo propuse, ¿pero cuántosde ustedes propusieron nombres de mujeres? Porque si todos proponen hasta nos pasamos de la cuota”, pero “establecer una cuota para compensar no me parece” correcto, expresó.
“Hay politización en el tratamiento de estos temas”
“Yo no tengo problema de género”, afirmó Barrios. “Me traen 30 nombres de mujeres que tienen su merecimiento, los voy a votar a los 30”, sin embargo “creo que otros son los que tienen problema de ideología”.
“Ediles colegas han propuesto los nombres de la Dra. Adela Reta y de Rosa Luna. La Dra. Reta fue ministra, codificadora, gran abogada, jurista indiscutible, no tiene una calle y fue propuesta dos veces por ediles colorados y la Junta no lo trató”. “Rosa Luna, una figura del Carnaval, la cultura, tiene un espacio público que es una pequeña plazoletita pero se había propuesta para una calle y no se aprobó”.
“Cuando empezamos con eso de que este es blanco, colorado o frentista es complicado. Acá hay que pensar ¿fueron importantes para Montevideo?, y abrimos el abanico cultura, deporte, academia, etc., no tengo problema en votar, sin perjuicio de si la persona fue blanca, colorada o del Frente”, aseguró.
Pero tal como se ha actuado en la Junta “tengo que entender que hay politización en el tratamiento de estos temas”. “Estas dos mujeres cumplen con los requisitos, dan con la talla y superan el mínimo, ¿por qué no se aprueba?, ¿cuál es la excusa?, ¿por qué las vetamos?”, inquirió.
“La forma no es cuantificando y estableciendo tres por uno, porque llegado un momento para votar mañana a un hombre que se merece una calle, por ejemplo no hay calle Neil Armstrong y si queremos homenajearlo tenemos que votar tres mujeres, o esperar a que se voten tres mujeres, o compensar con tres mujeres, o hacer un paquete de cuartetas donde haya tres mujeres y un hombre. No me parece correcto porque se sube demasiado la vara a los hombres y se baja a las mujeres. Y no es un tema de machismo porque hay excelentes mujeres que han hecho mucha cosa por Montevideo y Uruguay que merecen un lugar en el nomenclátor”, afirmó el edil.
Cambio de nombres y calles con nombres “raros”
Barrios también cuestionó que se cambie el nombre de las calles, porque si se llama de determinada forma y se conoce así “es porque en su historia hubo algo que llevó a que se llame de esa forma. No estoy de acuerdo en modificar el nombre de la calle para darle ahora otro nombre que tiene que ver con este presente” y no con la historia a la que refiere el nombre que lleva.
El cambio de nombre sin respetar el nombre previo hace que a muchas calles o avenidas se las llame con el nombre anterior. “A José Batlle y Ordoñez le llaman Propios, para muchos Mercedes sigue siendo Dante” porque las personas las llaman “en función a la fecha en que se nacieron y se criaron”.
Respecto a los nombres “raros”, por ejemplo Camino de las Tropas, Camino el Bajo de la Petisa o Camino Paso del Andaluz son nombres que “tienen su historia y significado aunque muchas veces no lo conozcamos, pero sí es conocido y hacen al lugar donde están ubicados”.
“Lo que la Intendencia debería hacer es poner una chapa explicando o reseñando por qué ese nombre” que muchos desconocen, “incluso la gente no siempre sabe por qué una calle se llama Ellauri o Berro”, comentó.
Acuerdos y criterios amplios
“Lo que hemos visto en estos últimos tiempos es reconocer mayoritariamente alguna figura vinculada a la lucha social o a la izquierda más que a otros patrones”, dijo el edil Javier Barrios.
Pero también se ha llegado a acuerdos. “Por ejemplo cuando la Junta autorizó las Marcas de la Memoria que tiene que ver con lo lugares de lucha de resistencia contra la dictadura” donde “tantos lugares aportó el Partido Nacional, tantos otros aportó el Partido Colorado, organizaciones sociales y el Frente Amplio, y se llegó un número determinado que fue las que aprobó la Junta”.
También hubo un “criterio amplio” en el “Espacio de los Soles, que están en la Peatonal Sarandí. Los últimos tres fueron mujeres: Matilde Rodríguez de Gutiérrez Ruiz vinculada a la política y los Derecho Humanos, Ida Vitale vinculada a la cultura, y también Ida Holz por la física, la matemática y el proceso de evolución de la informática en Uruguay. Fueron tres mujeres con perfiles totalmente distintos”.