El pasado viernes 25 en horas de la mañana, la presidenta de Ancap, Cecilia San Román llegó hasta la Torre Ejecutiva acompañada por la ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona. Tenían prevista una reunión con el presidente de la República, Yamandú Orsi. El objetivo era informar sobre las finanzas de la petrolera estatal. De ese encuentro también participó el secretario de la Presidencia, Alejandro Sánchez. Con una laptop llena de gráficas, San Román y Cardona le daban a conocer algunos números a Sánchez y Orsi. Tras la reunión se convocó a la prensa, ya que se informó que el presidente quería realizar algunos comentarios sobre los números que se encontraron en Ancap.
“Después de 10 años, volvemos a tener números negativos en el balance de la empresa Ancap”, dijo Orsi basándose en los números proporcionados por San Román y Cardona. Agregó que en 2019 Ancap registró una ganancia de 41 millones de dólares, mientras que en 2024 incurrió en pérdidas por 118 millones de dólares. Además, señalaba que en noviembre de 2024 la anterior administración solicitó un préstamo de 160 millones de dólares, lo que elevó la deuda total de la empresa a 255 millones de dólares.
“Estos números repercuten en la gestión, en la visión de la empresa pública, en la economía toda”, expresó el presidente y aseguró que “el cambio de gestión que aplicará el organismo no afectará el bolsillo de los uruguayos”.
Tales datos fueron inmediatamente cuestionados desde la ahora oposición, ya que en dicha conferencia no se aclaraba que durante parte de 2023 y 2024 estuvo parada la refinería por tareas de mantenimiento y remodelación, lo cual lleva a que los costos de Ancap se incrementen debido a que se debe importar combustibles refinados, más gastos derivados de nuevo equipamiento.
Por otra parte, no era la primera vez que Ancap tenía déficit anual. Entre 2010 y 2024, en siete oportunidades se registró un balance negativo. Según datos oficiales, los resultados financieros de entre 2010 y 2024 muestran una trayectoria variable.
En 2010, la empresa registró una ganancia de 111 millones de dólares, pero en 2011 enfrentó una pérdida de 288 millones de dólares, seguida de otra pérdida en 2012 de 15 millones de dólares. En 2013 y 2014, las pérdidas continuaron, alcanzando 169 millones y 323 millones de dólares, respectivamente. En 2015, la pérdida fue de 198 millones de dólares. A partir de 2016, Ancap logró resultados positivos durante cuatro años consecutivos: 15 millones de dólares en 2016, 39 millones en 2017, 88 millones en 2018 y 39 millones en 2019. En 2020, se registró una pérdida de 12 millones de dólares, pero entre 2021 y 2023 la empresa volvió a obtener ganancias: 88 millones de dólares en 2021, 163 millones en 2022 y 85 millones en 2023. Sin embargo, en 2024, reportó una pérdida de 118 millones de dólares.
En el período 2010-2019, acumuló una pérdida neta de 701 millones de dólares, mientras que en el período 2020-2024 registró una ganancia de 206 millones de dólares y en los tres primeros meses de este año, Ancap registra ganancias por 95 millones de dólares. Sobre estos datos, ni Orsi ni Cardona hicieron referencia.
“La ministra ridiculizó al presidente”
Los dichos del presidente llevaron a que se anunciara que la ministra de Industria sería citada al Parlamento para que explicara por qué realizó los comentarios sobre las pérdidas de 2024 y a la vez no dijera que en parte de ese año y de 2023, la refinería estuvo paralizada. El excandidato a la presidencia y hoy senador, Álvaro Delgado señaló que “gran parte de la deuda de hoy tiene que ver con el pago de la gestión Sendic” en referencia al período 2005-2008. En el programa Desayunos Informales (Canal 12) fue más allá y señaló: “Siento que en este caso la ministra de Industria ni cuidó y además ridiculizó al presidente. Porque o no conocía la realidad, que es grave, o conocía la realidad y se la ocultó al presidente, lo que es mucho más grave”.
Precisamente Cardona fue de nuevo a la Torre Ejecutiva el lunes 28, dos días después de su reunión con el presidente Orsi.
No se dieron a conocer detalles de con quién se reunió en esta segunda ocasión. Pero a la salida fue consultada por la prensa frente a la polémica que había desatado. Cardona se mantuvo en sus dichos y afirmó: “Ya lo dije claramente: atribuirle al paro de la refinería la mala gestión que se hizo en el tema Ancap dije que por lo menos era pobre, y lo sigo sosteniendo. Se entró a una parada de la refinería inoportuna, a destiempo, tarde, habiendo denunciado un convenio laboral en forma previa. Creo que la gente lo entiende clarito: si tengo algo que es absolutamente necesario [la parada de la refinería], que debía haber sido planificado, lo menos que tengo que hacer es denunciar el convenio laboral de forma previa”. La ministra añadió que comparte la idea de la oposición de que los responsables deben asumir sus gestiones, pero criticó que se atribuya la responsabilidad exclusivamente a los trabajadores, que durante el paro de la refinería tomaron medidas sindicales. “Hay que hacerse cargo en esto que nos plantean. Estoy de acuerdo en eso que dicen la oposición: tenemos que hacernos cargo de cuando gestionamos. Y ellos no se están haciendo cargo desde el lugar de atribuirle a los trabajadores esa responsabilidad”, dijo.
Cardona también abordó el argumento de la oposición, que señala el cierre de la refinería como la principal causa de las pérdidas. En este sentido sostuvo “si tener la refinería cerrada, según la oposición, es el único motivo de pérdida para Ancap, entonces refinemos. Es parte del debate, estoy dispuesta a conversarlo: que alguno me explique cómo entienden que es más barato comprar derivados hechos, a los que hay que agregarle el flete del país que sea, más que refinar en Uruguay. Creo que no resiste archivo”. Pero hay que señalar que técnicamente la refinería debe ser parada cada cinco o seis años para efectuar tareas de mantenimiento. Por otra parte, Cardona dijo que no esperará a que la citen y que concurrirá a la Comisión de Industria del Senado para argumentar su posición.
Lamela: “Endeudamiento es 13% menor que en 2019”
El director de Ancap, Daniel Lamela, expresó su opinión en diálogo con La Mañana sobre las declaraciones de Orsi y la situación de la empresa. “Me causó cierta perplejidad el planteo en este momento”, indicó, refiriéndose a la discusión pública sobre las pérdidas de 2024, que calificó como datos conocidos desde hace meses. “Esa información es absolutamente pública, está en las páginas respectivas de Ancap, seguramente el Tribunal de Cuentas de la República las tiene”, agregó, señalando que los resultados fueron auditados por la firma Grant Thornton y el Tribunal de Cuentas, y que medios de prensa ya proyectaban un déficit de entre 115 y 120 millones de dólares a fines de 2024.
Lamela propuso analizar los resultados con una perspectiva histórica. “No se puede mirar una foto, sino la película”. Destacó que la administración anterior logró una ganancia neta de más de 206 millones de dólares en el período de gobierno. Sobre la pérdida de 2024, explicó que el factor principal fue la parada de la refinería, un proceso técnico que ocurre cada cinco o seis años. “La refinería tiene que parar por mantenimiento, esta y todas las refinerías del mundo”, afirmó, detallando una inversión de aproximadamente 100 millones de dólares para actualizar equipos y avanzar hacia una futura biorrefinería.
La parada, que se extendió entre fines de 2023 y principios de 2024, implicó importar combustibles a mayor costo, generando un lucro cesante. “La empresa dejó forzosamente de ganar lo que se estima en 500 mil dólares por día”, precisó Lamela. Otros factores incluyeron problemas con el oleoducto, la diferencia de tipo de cambio con Argentina, que afectó las ventas en el litoral, y la volatilidad del precio del crudo debido a conflictos internacionales. “Por todas esas y otras razones se llega a este número absolutamente extraordinario en un año absolutamente atípico”, subrayó.
Sobre el endeudamiento, Lamela aclaró que es un 13% menor que en 2019 y que incluye deudas históricas, como un crédito con la CAF desde 2014-2015. “La deuda que estaba en dólares se pesificó en el año 2023, se pasó a pesos y con una tasa de interés por debajo del 6,5%”, explicó, comparándola con el 9% que Uruguay paga en mercados internacionales. Afirmó que el patrimonio de Ancap supera los 1000 millones de dólares y que la empresa es solvente, sin problemas económicos estructurales y el endeudamiento a la actualidad es de 12% a 13% menor respecto del año 2019. “Ancap no tiene ningún tipo de problema de solvencia económica”, aseguró, destacando que las deudas son operativas y están al día, principalmente con el Banco República. A su vez recordó que en 2016 hubo que capitalizar a Ancap en 1200 millones de dólares, lo cual llevó a tomar préstamos, entre ellos 300 millones de dólares de la CAF, lo cuales aún se siguen pagando.
Lamela también abordó la paridad de precios de importación (PPI), considerándola una referencia útil, pero no siempre precisa. Sobre posibles cambios en la gestión de precios, señaló que cualquier modificación requeriría un marco legal y reglamentario, y que las propuestas del nuevo gobierno no fueron explicitadas. Finalmente, sugirió que el gobierno debería enfocarse en reducir la carga impositiva de los combustibles, que representa casi el 50% en gasolinas y el 30% en gasoil, para mejorar la competitividad del país. “El foco debería estar en la transición energética lo más eficientemente posible, no cargar a Ancap con subsidios”, afirmó, mencionando el subsidio al supergás como un ejemplo.