Pausa. 25 referentes mundiales piensan como será nuestra nueva vida. Hugo Alconada Mon. PLANETA. 318 págs., $840, octubre 2020.
¡El libro de la pandemia! Más allá del chascarrillo sobre estrategias de marketing editoriales en épocas complejas, el presente trabajo de Hugo Alconada encierra muchas de las tensiones entre dinámicas empresariales y necesidades culturales, que es lo que define a la llamada industria cultural.
Hugo Alconada, corresponsal de La Nación en EE.UU., columnista del New York Times en español realizó en tiempo récord una veintena de entrevistas -gracias a los avances de nuestra sociedad globalizada e hiperconectada- a los referentes en campos claves: economía, ciencia, filosofía, sociología y, por qué no, literatura.
Decir que la lista es apabullante e impactante es poco, desde Yuval Harari a Fernando Henrique Cardoso, desde Michelle Bachelet a Jared Diamond, desde Thomas Piketty a Jeffrey Sachs, desde Fernando Savater a Muhammad Yunus son citados en torno a las preguntas: ¿Qué otra cosa no estamos viendo?; ¿Una nueva pandemia?; ¿Un colapso económico peor que el del crac del 29?; ¿Un rebrote autoritario?; ¿El estallido de la desigualdad social?; ¿El cambio climático?; ¿Cómo impactará esta distopía en nuestras vidas en los próximos años?; ¿Se aprende de la experiencia?
La propuesta central es frente a esta ola de desesperación, ansiedad y temor generar un espacio de reflexión, “desensillar hasta que aclare” y otear el horizonte: una pausa.
Más allá de lo atrapante de su lectura y de la velocidad con que se lo devora, comienzan a plantearse otro tipo de interrogantes. No hay entrevistados que planteen someramente que la pandemia fuese exagerada por los medios de comunicación. Del mismo modo, hay una sistemática apelación a las bondades globalizantes. Son escasos los que fijan su mirada en Estados fuertes que asignen políticas de defensa de largo aliento sus poblaciones, esto, políticas de Estado. Sí decenas de referencias, más o menos concretas, a la falta de liderazgos a nivel mundial o la apelación a la responsabilidad personal. Pero hay un consenso subyacente: vamos a emerger como sociedades más pobres, no todos los países están igualmente pertrechados para este desafío, en este repliegue a lo privado habrá necesariamente una necesidad de revalorizar aspectos de la vida que el vértigo de la dinámica contemporánea había invisibilizado. Quizás la lectura de los maestros estoicos pueda ser un buen comienzo.
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