El productor comentó el estado de los cultivos y señaló que hay “mucho optimismo” en el sector, que tiene como “una de sus ocupaciones principales” la reducción de costos.
Una de las principales ocupaciones de los productores en trabajar para bajar los costos, y en ese esmero es clave lograr más producción, dijo el presidente de la Asociación Agropecuaria de Dolores (AAD), Enrique Oyharzábal, a La Mañana, en cuyo diálogo se refirió al estado de los cultivos y a algunos planteos realizados en el lanzamiento de la cosecha de trigo, que este año llegó a la quinta edición.
Consultado sobre cómo se presenta la zafra, comentó que “la primavera ha sido muy favorable, con cultivos que están llenándose muy bien de granos”; además, “no ha faltado agua”.
“Los cultivos de gramíneas, tanto trigos como cebadas, están en muy buenas condiciones”, aunque “aún no se ha comenzado la recolección firme, pero estamos muy cercanos”, añadió. “La canola y alguna cebada húmeda que ya se están trillando, los resultados vienen muy bien. La canola, con rendimientos de entre 1800 a 2000 kilos; y la cebada húmeda, en los 5000 a 5500 kilos”; son promedios que “nos dejan muy conformes”.
Sobre los rendimientos equilibrio, dijo que para la canola “hay que cosechar más de 1600 kilos para poder lograr un resultado positivo; en trigo y cebada el rendimiento debe estar en 4700 kilos”, y en la perspectiva de los productores se espera poder llegar a esos buenos números.
En cuanto a los cultivos de verano, Oyharzábal dijo que “hay maíces de primera que tienen un área llamativamente mayor a la del año pasado”, y en la zona de influencia de la Agropecuaria de Dolores se presentan “muy bien”.
“También se han sembrado algunas sojas de primera”, pero hay productores que han decidido “esperar porque ha habido días fríos”; no obstante, “se comienzan a sembrar las primeras chacras con soja de segunda”.
El girasol es otro cultivo presente en las chacras, “pero en esta zona es incipiente”, con “muy poca siembra”.
La evaluación que se puede hacer sobre esos cultivos es muy primaria, queda mucho camino por recorrer para poder comenzar a formar una opinión de cómo resultarán. De todas formas, “los productores tienen mucho optimismo y una de sus ocupaciones principales es ver cómo bajar los costos. En ese sentido se trata de hacer las cosas con la debida prolijidad, con la adopción de tecnología, no retaceando en nada a los cultivos porque la única forma de superar los costos es con más producción”.
Cómo bajar costos
Los costos siguen siendo altos y “no ceden”, apuntó, “están caros los fertilizantes, el gasoil, los servicios. Los costos están altos porque Uruguay es estructuralmente caro” para “cualquier tipo de producción”, esa es una afirmación que “hacemos todos los años, sin lograr cambios, la pregunta es si esa es una situación que necesariamente debe ser así o puede ser modificada”.
En el discurso de inauguración de la cosecha del trigo realizado el viernes 4 de noviembre, la AAD realizó algunos planteos que de ser atendidos “permitirán bajar los costos de producción”, dijo Oyharzábal.
Uno de ellos es el proyecto de encalado que ya lleva 4 años de evaluación y está en la etapa de valoración económica a nivel nacional, demostrando que es una tecnología con la cual “se puede recuperar la capacidad productiva de los suelos hasta en un 30%”.
Para la AAD “es clave” un mejor “acceso a los mercados” bajando aranceles y haciendo tratados con aquellos países con los que ya tenemos vínculos comerciales, sin dejar de alcanzar nuevos que nos permitan vender más y mejor nuestros productos.
“La conflictividad laboral en algunos sectores” es otro tema de preocupación en cuanto “golpea de forma directa la capacidad de vender nuestros productos”. Este año, “en varias ocasiones, quedaron camiones de ganado sin cargar a planta, leche que se tuvo que tirar y contenedores que no se pudieron bajar o cargar en los puertos”. El planteo no es dejar de reconocer derechos a los trabajadores, sino “que se respeten los de otros, que también son trabajadores, y se ven afectados por medidas gremiales que perjudican el cumplimiento y la competitividad” del país.
La mejora en infraestructura es clave para bajar costos. Oyharzábal comentó que nuevo puente sobre el río San Salvador es una obra “muy importante en época de zafra, pero para sacar la producción son fundamentales también las rutas departamentales y los caminos vecinales”. Sobre este punto, señaló el estado de las rutas 95, 96 y 105 de acceso a Dolores y ciudades de la zona, por donde pasa “una gran cantidad de producción” con destino a puerto o frigoríficos. El estado de esas rutas “es bastante malo”, con consecuencia directa en la efectividad productiva y mayor riesgo de siniestralidad.
Recordó que hace un año se cuestionó que algunas intendencias multaran el uso de caminos vecinales por parte de camiones que salen con la producción luego de una lluvia, pero ahora “son más las intendencias que se suman a esa modalidad”, a pesar de que el productor cumple con sus obligaciones y su producción es perecedera, lo que significa que “si el grano está pronto hay que cosecharlo y si el ganado está gordo hay que cargarlo”.
Una herramienta que “viene en franca mejoría” es la de los seguros agrícolas, sin embargo “siguen siendo caros, con poca extensión de área y coberturas insuficientes”. El gobierno debería “sentarse a dialogar con los productores y las compañías aseguradoras” para encontrar la forma que permita alcanzar la cobertura de riesgo que se necesita.
Sinergia agrícola ganadera
El presidente de la Agropecuaria de Dolores subrayó que Soriano es el departamento que carga “más ganado gordo con destino a planta”, lo cual “tracciona desde la extracción y fortalece el círculo virtuoso entre la ganadería y la agricultura”.
Hay una “sinergia muy importante entre agricultura y ganadería que nos ha permitido potenciarnos: al que tiene ambas producciones tanto como al que no tiene ganadería pero sí grano forrajero. El sector ha generado un círculo virtuoso entre la ganadería y la agricultura que va empujando al todo el sistema”.
Es un “vínculo simbiótico” con “la siembra diversificada de especies para forraje” como “sostén de la producción” combinada. “Se potencia la producción de cultivos para consumo de los animales, dando sostén a los precios, cuidado de los suelos y un mercado fluido para dichos granos, permitiendo potenciar a ganadería y agricultura de forma agrointeligente transformándose en un pilar de la sostenibilidad económica”. Es un círculo virtuoso que “empuja todo el sistema productivo desde la cría hasta la producción de granos” y como tal “debe ser cuidado con especial interés”.
La AAD señaló que este año se tomaron “decisiones de forma quizás algo impulsivamente” buscando “detener la exportación de ganado en pie, herramienta fundamental que ayuda a la formación de precios en este mercado”, pero por acción del presidente Yamandú Orsi y del ministro de Economía, Gabriel Oddone, se corrigió. Por esa acción, “queremos agradecer” al presidente y al ministro “que intervinieron esa decisión dejándola sin efecto, permitiendo que el libre mercado siga imperando en nuestra sana economía”.
Escuela agraria especializada en riego
En presidente de la Asociación Agropecuaria de Dolores, Enrique Oyharzábal, en declaraciones a La Mañana enfatizó que “es fundamental el riego” y por eso celebró “la impronta del gobierno”, que ha creado la Comisión Ejecutiva Interministerial para Asuntos de Riego. Se ha generado “un antes y un después para el desarrollo del riego”.
Para la AAD eso es un convencimiento sincero, y por eso ha instalado en la escuela agraria La Concordia un sistema de capacitación en producción y riego con la incorporación de equipos de alta tecnología.
Es importante que ese centro de estudios se convierta en “la primera escuela agraria especializada en riego del país” a la que puedan asistir jóvenes de todos los departamentos y capacitarse sobre el manejo del agua, uso, mantenimiento y reparación de equipos de última generación, aseveró.
En el acto de la inauguración de la cosecha de trigo, el subsecretario de Ganadería, Agricultura y Pesca, Matías Carámbula, allí presente, dijo que “la estrategia nacional del riego es reivindicar el riego como una política de Estado”, y los mensajes discursivos e institucionales llevaron “a la creación de un espacio en Presidencia, a dos niveles: el político y el técnico.
En el político “participan los ministerios de Ganadería, Agricultura y Pesca, de Economía, de Ambiente y Presidencia”. El segundo nivel “es de acuerdo y trabajo técnico de todas esas esferas del Estado”.
El plateo base “es que el riego sea una política de Estado con todas esas dimensiones que también abarca financiamiento y costos de energía”, aseguró el subsecretario.




















































