La actividad fue organizada por la Sociedad Agropecuaria de Cerro Largo y el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL). El presidente de la gremial agropecuaria reivindicó la importancia del sector ovino en un departamento con 2850 productores y más 380 mil animales.
Rodeado de las comodidades que proporciona el Local Conventos, en medio de un escenario auspicioso de precios de la carne ovina y con buenas expectativas para las lanas, se lanzó la zafra ovina 2025-2026. La actividad, que se llevó adelante el viernes 1º de agosto, contó con la participación de las principales autoridades nacionales y departamentales públicas y privadas, gremiales, técnicos y productores. En esta oportunidad, el lanzamiento fue organizado por el SUL y la gremial de ese departamento.
Durante su discurso, el presidente de la Agropecuaria Cerro Largo, Fabián Gularte, instó a los presentes “a mirar con otros ojos al sector ovino. Porque […] es mucho más que ovejas. Es un capital social, productivo y humano que se transmite de generación en generación. Es un pilar fundamental que sostiene comunidades, que da oportunidades, que mantiene viva la identidad de nuestra campaña”. En diálogo con La Mañana, el dirigente enfatizó la importancia que tiene “una punta de ovejas” y el significado que eso representa a la hora de asentar familias en el medio rural. Sobre todo, Gularte consideró lo que significa la oportunidad que el rubro ovino representa para muchos jóvenes y cómo “puede ser el primer paso para construir un futuro”.
Este lanzamiento se lleva adelante un mes después de que las tijeras comenzaran las funciones de esquila. En esa zona del país, como en otros lugares, muchos establecimientos desarrollan lo que se conoce como “esquila preparto” a partir del mes de julio, una modalidad que ha tenido muy buenos resultados. Es por la importancia de este oficio para determinados sectores de las comunidades rurales por lo que Gularte utilizó parte de su discurso para resaltar el oficio de esquilador, que debe “ser reconocido y valorado” y que ha permitido en los últimos años “exportar talento”, sobre todo en el viejo continente. Subrayó que “muchos jóvenes uruguayos que tal vez no encontraron oportunidades en otros sectores hoy recorren el mundo gracias es este oficio”.
De acuerdo con los datos aportados desde esa gremial, en Cerro Largo actualmente hay 2850 productores ovinos en un escenario de 380 mil animales. Ese departamento se encuentra en la segunda línea de producción y comparte este espacio con Tacuarembó, Rivera, Treinta y Tres y Rocha. A la cabeza del ranking de número de ovinos se encuentran Artigas, Paysandú y Salto. En ese sentido, Gularte señaló a los presentes la importancia que la ovinocultura representa para evitar más sangría de productores en el medio rural. A su entender “el sector ovino genera mano de obra como pocos. Aporta valor, trabajo y esperanza. Es fundamental en la lucha contra el despoblamiento del medio rural, porque donde hay ovejas, hay gente trabajando, hay familias apostando al campo, hay vida”.
En otro capítulo de su presentación, no dejó escapar la oportunidad de referirse a “las artesanas de la lana”, que con su trabajo transforman “una materia prima en una pieza única, cargada de historia, paisaje y sentimientos”. Sobre el aspecto social que representan quienes desarrollan esta actividad enfatizó que no solamente tejen productos, sino también construyen identidad, aportando desde una “economía circular y sustentable” que empieza en el campo y finaliza en las ferias, las vitrinas y diversos hogares en todo el mundo.
Consultado por La Mañana, Gularte señaló a la depredación que provocan las jaurías como uno de los principales perjuicios que impiden que muchos productores continúen en el sector. En la misma sintonía, advirtió que algo peor que las pérdidas económicas por muertes de animales es el desánimo que queda cuando sus majadas son desbastadas por perros. A su entender, este es el mayor causante de la pérdida de productores ovino en el norte del país.
En términos económicos, el dirigente agropecuario sostuvo que el rubro ovino es una buena opción a la hora de incursionar en la producción agropecuaria. En este sentido, resaltó la oportunidad que representa para familias que deseen permanecer en el medio rural o jóvenes que quieran forjarse un futuro en las actividades agropecuarias.
El cierre de plantas frigoríficas que se dediquen a la faena de ovinos en el norte del país se ha tornado todo un desafío para el sector. En su momento existieron conversaciones para que una industria faenara los animales adultos del lado brasilero, pero hasta el momento no han existido avances. Actualmente, los productores envían sus animales hacia el sur, lo que les genera mayores costos y por ende debilitan las rentabilidades de sus emprendimientos.