El Instituto de Estadística presentó datos referentes a la estimación de la pobreza por el método del ingreso. El porcentaje de personas bajo la línea de pobreza fue de 13,4% en el total del país, 13% en Montevideo y 13,7% en el interior. El porcentaje de pobreza en los menores de 17 años es sensiblemente mayor al promedio nacional. Aproximadamente un tercio de los niños menores de 6 años vive en hogares pobres. Dicho porcentaje es de aproximadamente 28% entre los 6 y 17 años.
La pobreza en Uruguay se mide por el nivel de ingresos. Y en este sentido hay diferentes segmentaciones. Por ejemplo, se toma el número de miembros de un hogar, si es inquilino o propietario y si vive en Montevideo o en el interior. Un hogar inquilino de Montevideo compuesto por tres personas, con ingresos totales líquidos inferiores a $ 52.581, se considera pobre. A su vez, un “hogar no inquilino” (propietarios) de Montevideo compuesto por tres personas, con ingresos totales líquidos inferiores a $ 38.964 también se considera pobre. Para el interior, estos valores son de $ 40.729 y $ 32.180, respectivamente.
Si el hogar tiene un solo integrante y es inquilino, si el ingreso está por debajo de $ 22.577, es pobre en Montevideo y en el interior por debajo de $ 18.249. Sobre este punto, el director técnico de INE, Marcelo Bisogno, realizó algunas consideraciones. Puso algunos ejemplos. La pobreza se mide por nivel de ingreso, por lo cual, si se tienen, por ejemplo, obras de arte, pero ningún ingreso, la persona se considera pobre, lo cual es algo totalmente excepcional. Pero también se mide el ingreso del hogar, por lo cual no se discrimina si dentro de un hogar alguien tiene mayores ingresos que otros, y no se analiza el consumo sino el ingreso.
Cambios en el consumo
Uno de los cambios fundamentales en este último informe es que se modificó la metodología para medir la pobreza, por lo cual Bisogno aclaró en la presentación que no son valores comparables con los de 2006. Uno de los cambios principales es que variaron los bienes de la canasta que se usan para medir su costo. Por la canasta aplicada desde 2017, la pobreza en 2006 era de 50% y ahora se ubica en 17,3%.
Este cambio entre ambos años fue atribuido por el director técnico de INE “al crecimiento y un cambio dramático en la distribución del ingreso”. También se señaló que si se tomara la canasta de consumo de 2006 el nivel de pobreza actual sería muy bajo (8,3%). Esto se debe a un cambio importante en su composición.
Se debe tener en cuenta que hace 20 años, bienes de consumo como la telefonía celular o vehículos no eran tan accesibles. Dentro de la canasta básica cambia el peso de sus componentes. Entre la metodología de 2006 y la de 2017 se observa que el incremento de la canasta básica total (CBT) se debe al acceso a servicios y bienes más caros. Y esto es más significativo en el interior. El caso más evidente es el de las comunicaciones, por el uso de celulares. Dentro del peso en la canasta no alimentaria, el rubro comunicaciones creció 117% en Montevideo y 200% en el interior. Prendas de vestir lo hizo 28% y 85%, respectivamente. En transporte fue de 83% en el interior por la adquisición de medios como ser motos, mientras que en Montevideo llegó al 9%. Dentro de esta canasta, es interesante cómo en el interior el gasto en educación privada crece 54% y en Montevideo disminuye 2%.
Barrio con mayor pobreza: Casavalle
Si se observa la gráfica sobre línea de pobreza entre 2020 y 2024, se ven algunos “saltos” pequeños atribuidos por Bisogno a que mucha gente puede estar en los bordes de la línea de pobreza, y saldrían y entrarían a ella. El estudio también analizó la pobreza por región. En Montevideo, los hogares bajo la línea de pobreza están en 13% y en el interior en 13,7%.
En el interior, los mayores valores se registran en los departamentos de Artigas, Rivera y Cerro Largo, superando el 24%. Por otra parte, los niveles más bajos corresponden a los departamentos de Flores, San José, Colonia y Maldonado, que están por debajo del 9%. En Montevideo, es en la periferia donde se registran los mayores niveles de pobreza, mientras que los menores porcentajes de hogares pobres se registran en la costa sur del departamento. En los municipios A (Cerro, Belvedere, La Teja, Paso Molino, Tres Ombúes, Villa Teresa, Nuevo París), G (Colón, Melilla, Colón, Abayubá, Peñarol, Lavalleja, Nuevo París, Sayago, Conciliación, entre otros), D (Villa Española, Unión, Cerrito, Marconi, Casavalle, Borro, Municipal, Gruta de Lourdes, Las Acacias, entre otros) y F (Villa García, Manga, Maroñas, Villa Española, Flor de Maroñas, Ituzaingó, Jardines del Hipódromo, Piedras Blancas, Km. 16 Cno. Maldonado, Punta de Rieles, Bella Italia, entre otros), la pobreza es de 19% o más. Dentro de estas zonas, el barrio con mayor pobreza es Casavalle con el 49,6%, La Paloma-Tomkinson (44,8%) y Manga (41,5%).
Con una tasa de pobreza de 4% a 18% se encuentran los municipios C (Aires Puros, Atahualpa, Prado, Solís, Nueva Savona, Cristóbal Colón, Complejo Habitacional Parque Posadas) y E (Buceo, Malvín Nuevo, Malvín, Punta Gorda). En los municipios B (Palermo, Punta Carretas, Buceo, La Blanqueada) y CH (Pocitos, Buceo, Parque Batlle, Villa Dolores, Punta Carretas, y otros), el nivel de pobreza es de 0 a 3,9%.
La “infantilización de la pobreza”
Una de las conclusiones más relevantes es que la pobreza, por la nueva medición, aumenta en el interior, en comparación con la metodología de 2006. Otro aspecto destacado es la “infantilización de la pobreza”. “Esta canasta de medición ratifica ese hecho”, dijo Bisogno. La pobreza en los menores de 5 años es de 32% y en adultos mayores de 65 años de 6,3%. Esto, el técnico del INE lo denominó “un fenómeno netamente nacional, dentro de América Latina. Los niveles de pobreza en adultos mayores dentro de Latinoamérica serían la envidia de cualquiera y los de los menores, la envidia de nadie”, señaló. Por grupos de otras edades, la pobreza afecta a entre 6 a 12 años al 28,1%, de 13 a 17 años al 27,5% y de 18 a 64 años al 15,4%.
Por otra parte, en términos de la ascendencia étnico-racial de las personas, es la población afrodescendiente la que registra mayores niveles de pobreza. En el año 2024, para el total del país, la incidencia de la pobreza para las personas que declaran tener ascendencia afro es superior en 13 puntos porcentuales a la estimación que para quienes declaran tener ascendencia blanca. La pobreza afecta al 28,7% de este sector de la población, mientras que para aquellos que se identifican como de ascendencia blanca, la pobreza se ubica en 15,7%.
El peso del alquiler en los gastos
Dentro de la metodología aplicada, se puede observar los costos de una canasta básica alimentaria (CBA), canasta básica no alimentaria (CBNA) y canasta básica total (CBT), tanto para Montevideo como para el interior. En este aspecto, se divide entre hogares entre una, dos, tres, cuatro y cinco personas. La canasta básica total incluye alimentos y diferentes bienes de consumo. Los valores detallados son los mínimos que tener como ingresos para no caer en la pobreza. Por ejemplo, en Montevideo, un hogar con una persona y que alquila necesita un ingreso (a valores de julio 2024) de $ 23.320 y en el interior de $ 18.844. Si en el hogar hay tres personas, el ingreso debe ser de $ 54.431 en la capital y $ 42.154 en el interior. Por otra parte, la canasta básica alimentaria es en un hogar de una persona, de $ 6.232 en Montevideo y $ 5.358 en el interior. Si el hogar es de tres personas, los valores son de $ 18.697 y $ 16.073. Si se observan los hogares que no pagan alquiler, la canasta básica total baja notoriamente. En un hogar de Montevideo con tres integrantes sin alquiler, la canasta básica total llega a $ 40.505.
En el informe sobre metodología de la encuesta, se concluye que “el valor del consumo no alimentario, incluyendo el alquiler, es 33% mayor en Montevideo que en el interior”. Si se excluye el alquiler, el consumo no alimentario es 24% mayor en Montevideo. Por lo tanto, la brecha del gasto no alimentario entre regiones es mayor que la observada en el gasto alimentario (16%). Otro aspecto que se destaca es que, si se considera el costo del alquiler, la vivienda representa el 46% del consumo no alimentario en Montevideo y algo menos en el interior (43%). Esto determina que, en el promedio de los hogares inquilinos, el peso del rubro vivienda en la línea de pobreza sea equiparable al consumo de alimentos.
En transporte, el gasto en la adquisición de vehículos personales y especialmente los gastos asociados a su funcionamiento (como el combustible, la patente y los servicios de reparaciones), son mayores en el interior. En Montevideo, sin embargo, son mayores los gastos en los servicios de transporte que comprenden fundamentalmente los boletos del transporte colectivo.