En la última semana de febrero y luego de tres días de operaciones el precio de la lana cayó de US$ 10,24 a US$ 10,21, la diferencia es de apenas US$ 0,03, por lo que el precio se mantiene estable.
En el año el Indicador del Mercado del Este (IME) ha operado durante siete semanas con el precio promedio registrando alzas o bajas, pero sin perder la estabilidad. En el caso concreto de febrero el precio nunca cayó por debajo de los diez dólares, el precio menor fue de US$ 10,04 el martes 15 pero esa misma semana se recuperó y se posicionó en US$ 10,24.
Las perspectivas para el mercado internacional de la lana son buenas, tal vez sea la única materia prima de exportación de nuestro país que no ha tenido una disparada en sus valores.
El martes 22 las ventas fueron en Melbourne, Sídney y Fremantle con 15.397 fardos vendidos de 17.690 ofertados.
El precio promedio se ubicó en los US$ 10,22 el kilo base limpia.
Los precios tuvieron “leves bajas” en “todos los diámetros”, informó el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) y con vendedores que no aceptaron esa caída de precios por lo que se retiró de la venta el 13% de la oferta.
Las operaciones continuaron el miércoles 23, con una suba del promedio a US$ 10,27 y 16.826 fardos vendidos de un total de 18.680 ofertados.
“Hubo leves incrementos en todos los diámetros, siendo las de 18,5 micras las de mayor incremento” ese día, con un alza del 0,9%.
El jueves el Indicador cerró la semana a US$ 10,21, tres centavos de dólar por debajo de los US$ 10,24 de la semana anterior.
Se vendieron 8.936 fardos debido a que ese día las ventas sólo fueron en Melbourne. “De una oferta de 10.341 fardos (que incluía lanas de Nueva Zelanda), el 13,6 % quedó sin vender”, señaló el SUL.
En cuanto a los valores por micras “hubo leves bajas en precios de lanas finas, siendo la excepción las de 17 micras”.
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