En el mes de junio, el Comité Olímpico Uruguayo designó a Liber García como jefe de la misión uruguaya en los Juegos Olímpicos de París 2024 y, por tanto, responsable de velar por el bienestar de los atletas celestes en la competencia. En la actualidad es el presidente de la Federación de Triatlón en Uruguay, también de la Confederación Panamericana y miembro del board de World Triathlon.
“Por el comportamiento a la delegación hay que darle medalla de oro”
En nota concedida a La Mañana desde París, Liber García realizó una puesta a punto sobre la estadía y desempeño de nuestros atletas.
¿Cuántos atletas presentó Uruguay en estos Juegos Olímpicos?
Uruguay vino con una nómina de 25 atletas, que al final fueron 27, ya que hay dos atletas de rugby que se consideran de reserva. Fueron muy protagonistas porque las lesiones son comunes. Ya todos los atletas han tenido su participación.
¿Cómo se evalúa el desempeño de nuestros atletas? Hubo actuaciones muy destacadas que no llegaron a más, en algunos casos por la propia decisión de la organización, como en el caso de Lola Moreira.
Todos nuestros atletas son ganadores antes de pisar Francia. El hecho de clasificar es para una élite única en el mundo. Lo consideramos importante y más para un país pequeño como el nuestro, teniendo en cuenta la inversión con diferentes condiciones. Para atletas como en vela y rugby cualquier clasificación es mundial. Esto es muy importante. El balance es sumamente positivo y sin duda al comportamiento de la delegación hay que darle medalla de oro, se han dado momentos de camaradería muy buenos.
¿Como jefe de misión has encontrado dificultades que afectaran a los deportistas?
A mí me gusta ver los aspectos positivos. Esta es una villa fantástica en Saint Denis, se adoptó un lugar histórico. Se construyeron edificios muy bonitos, todo ha sido muy confortable. Los problemas que encontramos son los típicos que se ven en la inauguración de algo, pero fue lo único. Debemos considerar que es una ciudad a estrenar y hay cosas que pueden suceder. Nuestra delegación siempre colocó lo positivo, nos acomodamos enseguida y las condiciones que tenemos son fantásticas, estamos muy bien ubicados. En cuanto a la alimentación hubo un objetivo de reducir el consumo de proteínas animales, pero en las reuniones diarias se planteó y se acomodó. Lo que más repercute es que los jugadores argentinos de rugby, que arrancaron antes, plantearon reclamos, pero luego de la inauguración ya se habían acomodado. Debemos tener en cuenta que se atienden a más de 14.000 atletas de todo el mundo. Existe una amplia oferta en esos rubros.
¿La disciplina alimentaria del deportista uruguayo está en línea con los estándares internacionales?
Es difícil la pregunta, pero todos se cuidan, son muy profesionales, ya que a nadie se le regaló nada y tampoco lo quieren hacer. La verdad es que todos han sido muy profesionales con la alimentación y descanso.
Se habla de un verano muy intenso, ¿se acostumbraron nuestros deportistas a las altas temperaturas?
Particularmente, para nuestra delegación no se sintió el calor, ya que estamos a las orillas del río Sena. Las mañanas son frescas y ves a todo el mundo con camperas. Estas temperaturas son cuando estás al sol, pero no hemos sufrido el calor. Salió en prensa como hecho negativo que uno de los deportistas medallista olímpico se lo vio durmiendo afuera, pero el salió a aclarar que tomó la decisión porque le agrada tener un contacto con la naturaleza.
Nos enteramos de que había ómnibus para traslado de delegaciones que no tenían aire acondicionado y que algunos deportistas europeos se habían descompensado. ¿Es cierto?
Eso es cierto y pasó, fue todo un tema para ir ajustando detalles. La primera semana fue muy intensa en aspectos de seguridad, había sirenas abiertas todo el día. Por temas de seguridad, no se puede abrir las ventanas, sumado a lo de los ómnibus, pero fue previo a la inauguración y se corrigió. Son cosas que pasan, no sé si podríamos inaugurar algo así. Han sido unos juegos fantásticos y hemos visto las imágenes como el beach vóley con la torre Eiffel, son todos escenarios espectaculares.
Una cosa es competir y otra es hacerlo para ganar. ¿Qué es lo que está faltando para conseguir figuraciones más destacadas?
Falta mucha inversión, básicamente es eso. Debemos seguir mejorando día a día para ir acercándonos a ese nivel, pero es más profundo. Vas a ver en el medallero que América del Sur en general está muy relegada. Argentina, por ejemplo, tiene dos medallas, y Brasil está mejor pero le cuesta, hay que ver ese contexto y es un problema no solo el país sino el continente. No es lo mismo moverse entre los países europeos que moverse por aquí, es un problema de conectividad sumado a los precios. Es bastante complejo y no es lineal, pero hay una diferencia de inversión e infraestructura.
¿En esto influyen los dineros que se manejan en torno al fútbol y que se relega a los considerados como “deportes menores”?
Acá hay una diferencia muy grande con respecto al fútbol, pero creo que estamos en el camino. A partir de la ley que impulsó el senador Botana ingresaron más recursos, pero vamos a ir paso a paso, avanzando hacia el futuro y esperamos recibir los frutos.
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