La nota publicada por La Mañana en su edición web sobre pensiones por discapacidad ha generado inmediatas repercusiones tanto a nivel político como social. Los casos se siguen multiplicando en todo el país y vuelven a generar polémica sobre el criterio aplicado por el Banco de Previsión Social (BPS) a la hora de negar o cancelar pensiones por discapacidad.
En diálogo con La Mañana Lucas Caraballo, de 18 años y con diagnóstico de Parálisis Cerebral- Diplejía espástica MMII desde los 11 meses de nacido, nos contó su historia de vida y reclama que se le devuelva la pensión para “poder seguir estudiando”.
¿Cómo ha sido tu historia de vida?
A los 11 meses del nacimiento me detectaron Parálisis Cerebral (PC) que me afecta a nivel neurológico todos los músculos pero más que nada piernas y manos aunque sobre todo piernas más allá de que tengo alguna discapacidad en las manos.
Hasta los 7 años no pude dar mis primeros pasos hasta que mi madre a través del Pereira Rossell de Montevideo marcó una cirugía donde pudieron extender los tendones de ambas piernas. Fueron seis cirugías en una y a partir de ahí pude dar mis primeros pasos y mejorar mi calidad de vida. Comencé a ver mi recuperación de una forma distinta ya que pude hacer fisioterapia y otras actividades con bastante dificultad pero algo es algo.
Nos imaginamos que no fue fácil poder llevar adelante tu vida con tantas limitaciones.
Sí, porque comenzó una lucha psicológica y moral porque a medida que vas creciendo este tipo de situaciones te hacen madurar y vas viendo una parte de la sociedad que es más oscura, las burlas, los niños chicos que ven y le preguntan a los padres ‘¿qué le paso?’ y no saben lo que responder. También aparecen las peleas en la escuela, ya que yo no fui muy quieto, siempre intente buscar mi lugar. Pero bueno, fue pasando esta situación y cuando llegué a los 10 años fui sometido a una cirugía en ambas piernas, más que nada a nivel muscular, y si no me equivoco conté con más de diez cirugías. Ahí comencé a notar el cambio ya que si bien necesitaba ayuda comenzó a notarse la mejoría, en la forma de caminar y en el apoyo de todos.
¿Cómo te manejas en la actualidad?
Hoy en día camino con muletas, tengo que usar férulas la mayor parte del tiempo, sino siento mucho dolor de tipo crónico, y bueno tratando de ir progresando…
La pregunta es si algún día llegarás a ser normal, eso es más que nada lo que la sociedad te inculca. La última cirugía fue en el año 2019 y sinceramente fue la que más sufrí, el tema era que tenía 15, 16 años y estás muchos días lejos de tu familia, lejos de tus amigos y la verdad es que es complicado, fue a nivel óseo, prácticamente me hicieron ‘chapa y pintura’.
Hablabas del día a día, ¿cómo era la vida en el Liceo?
De chico si bien las risas eran más seguidas, con el tiempo fui consiguiendo respeto, tratando de que nadie te pase por arriba, sé que no es la mejor forma pero era un niño. Cuando llegué al liceo tenía mi grupito de amigos armado que siempre estaban para mí y fui pasando año en año la verdad que sin ninguna dificultad, nunca me fui a examen, pude generar el respeto por mi lucha.
Estudie tres años en el Liceo 6 en el cual estuve en el piso de abajo ya que se me hacía imposible subir por las escaleras, los otros tres años los curse en el liceo Pomoli y fue un poquito más de lo mismo, estuve en los salones de abajo para no bajar y subir escaleras en el recreo.
¿Cómo era la relación con aquellos que no te conocían?
Yo siempre fui muy de aceptarme como soy. En mi grupo de amigos siempre existió el humor negro con todos, a mi me quedo el apodo de “rengo”, a las personas de afuera les resulto cómodo aunque me preguntan como es que soporto esto de esa forma pero en lo interno no resultan tan así.
Desde mi última operación sufro depresión y hay comentarios y situaciones que me bajonean mucho, trato de superarlas solo y que muchas personas no se den cuenta, trato de no victimizarme.
¿Cómo te manejas hoy en día?
Por ejemplo, tengo ayuda para poder usar algunas prendas, para usar las férulas, los championes, para usar camisas es mi madre la que las prende. En mi familia no se lo toman tan a la ligera como me lo tomo yo, es una lucha que día a día pasamos pero vamos madurando. Las personas mayores como mis abuelos ven esto de una forma muy extraña pero siempre tuve su apoyo.
¿Cuáles son tus planes futuros Lucas?
Ahora que termine el liceo quiero irme a estudiar, esta es una de las razones del reclamo que llevamos adelante frente al BPS porque prácticamente me la quitaron y me gustaría para poder ayudar a mi familia.
TE PUEDE INTERESAR
