Uruguay participa en la Expo Osaka con el objetivo de posicionarse y fortalecer los lazos con Japón y toda la región asiática. El stand ofrece degustaciones de alimentos y expone productos nacionales como la lana. En diálogo con La Mañana, el responsable del pabellón y exsubsecretario de Turismo, Benjamín Liberoff, afirmó que se busca ampliar la cooperación y atraer inversiones. “De los US$ 90 millones que Uruguay exporta actualmente a Japón, cerca del 60% está relacionado con la carne y sus derivados”, graficó.
¿Cuál es la importancia de la participación de Uruguay en la Expo Osaka?
Las exposiciones universales tienen una larga tradición. Uruguay ha estado participando regularmente de ellas con diferentes características, pero siempre contemplando los aspectos relacionados al posicionamiento del país y la búsqueda de nuevos mercados y posibilidades de nuevas inversiones. En este caso se complementa con algunos segmentos que tienen valor estratégico en esta coyuntura, como la presencia en el mercado de la región asiática, donde vive el 50% de la población aproximadamente. El segundo aspecto es que tenemos más de 100 años de relaciones diplomáticas y cooperación con Japón, por lo cual en todo el territorio nacional uno puede verificar actuaciones de la cooperación japonesa en múltiples aspectos, donaciones vinculadas a la salud o paneles solares o desarrollos culturales, y se complementa con centenares, si no miles, de becas para estudiantes o personal para desarrollar cursos de posgrado. Eso tiene un agregado más, que es tratar de captar una parte de los japoneses que viajan a América Latina, ya sea como turistas convencionales, ya sea porque son jugadores de golf o porque llegan a San Pablo donde está la mayor concentración de colectividad japonesa de descendientes japoneses, donde hay más de dos millones y medio.
¿Qué se ha podido ver en el stand y cuáles fueron las áreas prioritarias en lo que se definió mostrarle al público sobre Uruguay?
Nuestro stand en esta oportunidad tiene 62 metros cuadrados y tenemos tres áreas. Una que permite desarrollar degustaciones de vinos o de aceite de oliva u otros productos, otra que es una gran pantalla donde se muestran diferentes videos de todo tipo, y otra con pantallas menores que permiten presentaciones para grupos reducidos de personas sobre temas particulares. También hay un área de reuniones en un entrepiso que tiene el pabellón. De los US$ 90 millones que Uruguay exporta actualmente a Japón, cerca del 60% está relacionado con la carne y sus derivados. Por lo tanto, todo lo relativo a los productos agropecuarios tiene un lugar muy importante, y ubico en esto no solo los primarios, sino el diseño, confección, entre otros. También algunos derivados del Tannat, la oliva, y algunas camisetas celestes, porque el fútbol es un atractivo muy singular para el público japonés.
¿Qué actividades se han realizado en el pabellón uruguayo?
Inicialmente se hizo la apertura del stand. El 20 de mayo estuvo dedicado a los temas de derechos humanos y la significación de esa fecha para Uruguay. El Día Nacional de Uruguay se celebró el 17 de junio, la delegación oficial estuvo encabezada por el ministro de Ganadería, Alfredo Fratti, y unas 30 empresas acompañaron. El 24 de junio se cumplieron 90 años de la muerte de Gardel y Japón es el cuarto mercado mundial del tango. El 9 de julio tuvimos una actividad con diferentes diseñadoras que trabajan con lanas vírgenes. Y el 16 de julio recordamos los 75 años del Maracaná.
¿Qué retorno espera el país a nivel económico o diplomático con esta participación?
Nosotros estamos trabajando con un conjunto de indicadores con los cuales procuramos en el informe final trasladar la experiencia y lo que pueden ser las expectativas. Yo al principio señalaba cuáles eran justamente las razones de la presencia de Uruguay y esas son las expectativas en términos generales. En setiembre pensamos ampliar la degustación, eventualmente con dulce de leche o alfajores, también con otros productos lácteos, buscando poner en conocimiento del mercado japonés en este caso y otros asiáticos algunas alternativas para poder ampliar el comercio. Además, estamos buscando a partir del apoyo de la empresa calificadora de los bonos Samurai, algunos capitales o fondos que pueden interesarse por desarrollos que Uruguay está llevando adelante en el sector privado. A su vez, hemos visto las posibilidades de cooperación, dado que participaron la Corporación Nacional para el Desarrollo, la Agencia Nacional de Desarrollo, el Instituto de Logística y el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, en el ámbito del área ferroviaria, por ejemplo, para los temas del riego o de la movilidad, en particular en lo metropolitano que es una de las prioridades del gobierno. La Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA) y la Organización de Comercio Exterior de Japón (Jetro), equivalentes a la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI) y a Uruguay XXI, respectivamente, junto con el Banco Interamericano de Desarrollo, han estado cooperando con nosotros para buscar contrapartes y fueron organizadoras de las actividades del Día Nacional.
¿Qué lectura hace sobre las relaciones comerciales entre Uruguay y Japón? ¿Considera que este evento logró afianzar ese vínculo?
Durante el Día Nacional tuvimos oportunidad de conversar con autoridades japonesas de diferentes niveles públicos y en las presentaciones privadas, y francamente existe una predisposición a mejorar esa cooperación. Yo simplemente voy a mencionar dos hechos para tratar de mostrar la amplitud de esa cooperación. El primero es que en la Dirección General Forestal están los antecedentes del estudio que Japón hizo de la potencialidad forestal que tenía nuestro país antes de que se aprobara en el 87 la Ley de Promoción Forestal, y el año pasado la firma Oji Holdings compró 42.000 hectáreas forestadas en Tacuarembó y Rivera, con la idea de no solo tomar la parte relacionada con la celulosa, sino también de agregar valor para mejorar el perfil del sector y de las exportaciones uruguayas. El segundo es que una de las personas que acompañó el almuerzo protocolar fue la diputada de Osaka que vino a la transición el 1º de marzo, y uno de los lugares que visitó fue el centro cultural que tiene la Agrupación Lubola C1080, y de hecho están cooperando con el desarrollo de esa asociación cultural. Por esto también el espectáculo del 17 de junio estuvo compuesto por Hugo Fattoruso y su compañero japonés que componen el dúo Dos Orientales y una pequeña cuerda de tambores y bailarinas del conjunto C1080. En eso yo también trato de graficar la potencialidad y la amplitud que tiene la cooperación.
La lana uruguaya fue protagonista
Uno de los productos uruguayos que cobró más protagonismo en el stand fue la lana, con una propuesta que invitaba a recorrer el proceso desde su estado inicial hasta la prenda terminada, lo que cautivó al público japonés.
Según contó Liberoff, en el pabellón se expusieron muestras en las distintas etapas del proceso que los visitantes pudieron apreciar en una experiencia sensorial y educativa, en un circuito acompañado de la proyección de un video con escenas del medio rural y las colecciones de diseño de las marcas que participaron.
Mientras que el público hacía fila para poder entrar y recorrer cada instancia del circuito, el equipo del stand, incluidas dos asistentes japonesas, contaba la historia detrás de cada muestra.
Dada la sorpresiva y positiva respuesta de la gente, la muestra de lana quedará expuesta en el pabellón para que futuros visitantes puedan seguir explorando su proceso.