El Poder Ejecutivo resolvió dejar sin efecto el proyecto Neptuno, iniciativa firmada por la anterior administración para construir una planta potabilizadora en Arazatí, San José. La decisión fue comunicada formalmente al consorcio Aguas de Montevideo, integrado por las empresas Saceem, Berkes, Ciemsa y Fast, que había sido adjudicatario de la obra.
El proyecto preveía la toma de agua del Río de la Plata, su potabilización y transporte hasta Cuchilla Pereira, con una inversión cercana a los 900 millones de dólares a lo largo de 17,5 años. El contrato fue suscrito el 23 de enero de 2024, pocos días antes del cambio de gobierno.
Desde el inicio de su mandato, el gobierno de Yamandú Orsi expresó reparos sobre el proyecto y en abril se acordó suspender por 90 días la ejecución del contrato para analizar alternativas. En ese período se conformaron mesas técnicas y jurídicas para revisar el contenido del acuerdo.
El gobierno impulsará un nuevo proyecto que contemplaría la construcción de una planta potabilizadora en las cercanías de Aguas Corrientes, con agua proveniente del río Santa Lucía. Además, se prevé extender una aductora hasta Cuchilla Pereira y realizar obras complementarias en el este del país. También se mantiene la voluntad de avanzar en la represa de Casupá como fuente adicional de abastecimiento.