Los ingenieros militares españoles tuvieron un papel destacado en las obras arquitectónicas civiles, militares y religiosas de muchos países de América Latina, entre ellos Uruguay, en los últimos años del siglo XVIII y primeros del XIX. Este mes se celebra el tercer centenario del centro que los formó: la Real Academia de Matemáticas de Barcelona.
La Real Academia de Matemáticas de Barcelona inició sus clases en la Ciudadela el 15 de octubre de 1720. En conmemoración de esta fecha, el Ejército de Tierra de España ha señalado como una de las efemérides oficiales para el año 2020 el “III Centenario de la creación de la Real Academia de Matemáticas de Barcelona” para recordar la apertura de este prestigioso centro académico, que fue referente de formación de la oficialidad castrense del siglo XVIII y es un antecedente directo de las Academias de Artillería e Ingenieros del Ejército.
La ubicación inicial de la Real Academia de Matemáticas de Barcelona fue en el edificio de la Ciudadela, de la que hoy se conservan el Arsenal, sede del Parlament de Cataluña y la Capilla Castrense, construidos bajo la dirección del Ing. Gral. Próspero de Verboom, a la vez primer director de la Academia. Esta institución, enmarcada dentro de los principios ilustrados, surge para preparar a los oficiales en conocimientos científicos de matemáticas puras (aritmética, geometría, álgebra o trigonometría) pero también aplicadas (hidráulica, arquitectura, pirotecnia y artillería, óptica, astronomía, geografía, etc.) frente a su anterior formación basada en la experiencia, la disciplina y el valor.
Podemos considerar que la Academia de Matemáticas de Barcelona fue el primer centro de enseñanza de ingenieros en España, ya que en la enseñanza civil no aparecen escuelas hasta el siglo XIX. Por tanto, las obras públicas civiles y militares acometidas en el siglo XVIII y mitad del siglo siguiente estarán planificadas y dirigidas por los hombres formados en este centro. La biblioteca de la Academia constaba en 1790 de 2.030 volúmenes. Fue el primer centro de España que otorgaba titulaciones tras una rigurosa formación, convirtiéndose en la corporación técnica más sólida y eficaz con la que contó la Corona junto con la Escuela de Guardiamarinas de Cádiz de 1711 que mantenía un nivel técnico semejante, que contribuyó a socializar el saber, y fue el origen de la primera escuela civil.
Los ingenieros militares españoles y su marca en América Latina
La historiografía moderna ha destacado, muy especialmente, el papel jugado por los ingenieros militares españoles en la producción arquitectónica americana en los últimos años del siglo XVIII y primeros del XIX, período éste particularmente delicado, marcado por los acontecimientos relativos a la configuración de los límites de su territorio en base a la independencia de sus naciones. La labor realizada, tanto militar, como civil y religiosa, recayó hasta entonces en los mencionados ingenieros. Los años de estos dos siglos fueron cruciales en la reconstrucción de las defensas, murallas, fuertes, puertos -muchos de ellos Patrimonio de la Humanidad, como son el Fuerte de Portobelo en Panamá, el Puerto de La Habana, Cartagena de Indias, o el Puerto del Callao-, ideando nuevos planteamientos en el sistema de la fortificación para resistir las oleadas de tropas extranjeras con propósitos anexionistas.
Realizaron construcciones y proyectos para la mejora de las condiciones de vida de sus habitantes; urbanizaciones al lado de los puertos, lazaretos y hospitales para acoger a los enfermos que arribaban después de una larga travesía, como el Hospital del Rey en Montevideo y otros proyectos de esta naturaleza que por falta de medios económicos no llegaron a materializarse, pero de los que se conservan los planos que acreditan la preocupación por dotar de sensibles mejoras a los habitantes de las ciudades.
Es de destacar la labor de ordenación del territorio. Levantaron planos de ciudades, distribuyendo de forma racional los edificios de las mismas, desplazando el edificio del hospital fuera del centro de la ciudad para aislar a los enfermos; plazas y teatros en el centro de la ciudad, alcantarillados, acueductos para traer agua a las ciudades. Así, sus más importantes monumentos arquitectónicos fueron realizados por ellos, demostrando una enorme capacidad de trazado, así como de resolución de problemas de composición y ornamentación. Edificios civiles, cabildos, palacios del gobernador, aduanas, cárceles, presidios, casas de la moneda, cumpliendo diferentes roles sociales vinculados a campos disciplinares como la ordenación del territorio, el urbanismo y las tareas defensivas que les eran inherentes y la creación de escuelas de matemáticas en las que se formarían los futuros ingenieros militares.
Actos conmemorativos
Para profundizar en el conocimiento de la repercusión dentro de la historia de esta Escuela de Matemáticas de Barcelona el Ministerio de Defensa, consciente de promover la cultura y patrimonio militar, estimuló la creación de un Grupo de Trabajo en el año 2002. La asociación “Grupo de Trabajo Academia de Matemáticas de Barcelona, S XVIII” está formado por un grupo de investigadores que con su estudio y publicaciones han contribuido al reconocimiento del Cuerpo de Ingenieros Militares. Esta labor fue premiada por el Ministerio de Defensa con la concesión del premio Cervantes 2017, por su contribución durante los últimos quince años a “la difusión del conocimiento científico y cultural de este Centro de formación militar modélico” (BOE 292/2017).
Los actos conmemorativos organizados por el Ministerio de Defensa, en su delegación de Barcelona, se celebrarán durante el mes de octubre y noviembre, dentro de las recomendaciones permitidas por la situación sanitaria. La inauguración tendrá lugar en el Palacio de Capitanía General de Cataluña en Barcelona el 15 de octubre. Esta programado un ciclo de conferencias y una exposición con varios videos sobre la Real y Militar Academia de Matemáticas y material procedente de varios archivos militares. Se ha editado un libro conmemorativo de la efeméride.
(*) Concepción Virgili. Catedrática de Sociología. Licenciada en Historia Moderna.
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