El historiador y periodista argentino Fermín Chávez (1924-2006) era un católico ferviente que se plegó tempranamente al peronismo, perteneciendo al núcleo más cercano a Eva Perón. A partir del golpe de Estado, pasa a integrar activamente la resistencia peronista y a desarrollar una intensa actividad intelectual en la línea revisionista. Amigo y discípulo de José María Rosa, dedica ingentes esfuerzos a la culminación de la Historia Argentina, iniciada por el Prof. Rosa. Cuestiona sistemáticamente la versión oficial de esta historia, así como los discursos sobre ciertos héroes de pies de barro. Es en esta línea que surge este vitriólico ensayo dedicado a mostrar el verdadero rostro del hipotético liberalismo en el Río de la Plata.
Y lo hace desde la pluma del propio Alberdi, el cual no vaciló en sus múltiples escritos en criticar a Mitre, Sarmiento y los oscuros intereses agazapados detrás de ellos. Evidenció el “platonismo de libertad” de los gobernantes argentinos de la década de 1860 que se traducía en despotismo, persecuciones, fraudes y dobles juegos. Señaló su manía de dar leyes y decretos y de hacer la república escrita antes de tener la república práctica. Indicó la doblez de quienes proclamaban que “las ideas no se matan” y arrasaban sin mayor miramiento a cualquier opositor.
Chávez sostiene: “Solamente por ignorancia o mala fe, se puede sostener la tesis de que Alberdi, Mitre y Sarmiento son, política e ideológicamente, la misma cosa… La historia mitrista ensalza a Urquiza no por su obra en la confederación sino por su retirada de Pavón, su silencio ante la matanza de Paysandú y su complicidad en el negocio porteño de la Triple Alianza. Y, a la inversa, silencia o menosprecia a una luminosa constelación de periodistas y escritores por haber pronunciado, en su momento, una palabra en favor del pueblo criollo, convertido desde arriba en ‘gaucho malo’”.
Recupera textos luminosos de Alberdi sobre estos “liberales”: “La vida pastoril americana, según Sarmiento, es la lucha entre la civilización europea y la barbarie indígena. Pero ¿Qué entiende por barbarie indígena? ¿La de los indios salvajes? No; la de los gauchos o campesinos argentinos que hablan español y no son otra cosa que la raza española y civilizada de los conquistadores de la América salvaje. Para él no es la civilización europea sino la inglesa y francesa actual”.
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