Por su eficiencia y cuidado ambiental las familias y también los negocios van incorporando, tanto en el medio rural como urbano, las estufas de alto rendimiento que utilizan biomasa (madera y pellets) para su funcionamiento.
Magna es una empresa nacional que está cumpliendo 25 años en el mercado y participará en Expo Melilla que se realizará del 31 de marzo al 3 de abril. “Luego de las suspensiones por la pandemia volvemos a estar”, dijo a La Mañana Fabián Manci, uno de sus directores. Magna ofrece productos de efectividad probada a nivel ciudad como rural, por ejemplo a través de Mevir que ha entregado “más de mil viviendas con estufas instaladas”.
“Es muy frecuente en el medio rural el uso de estufas a leña, por eso optamos dar a conocer nuestros productos en exposiciones como Expo Melilla”, señaló.
“La idea es que el público conozca este sistema eficiente” que además de cuidar el medio ambiente da “la posibilidad de calentar una habitación o toda la casa con mucho menos leña”.
Las estufas tradicionales “queman a baja temperatura” con lo cual la madera libera gases y produce mucho más partículas y humo, todos componentes dañinos para la salud. “Lo que se busca con estos equipos es que al ser cerrados la temperatura de la cámara de combustión es mucho mayor y los volátiles que se liberaban van a quemarse completamente, eso baja mucho el nivel de partículas que salen a la atmosfera en una relación de 100 miligramos en las estufas abiertas y 1 miligramo las cerradas”.
Magna cuenta con “un pequeño laboratorio en que probamos cada estufa que se fabrica” con el objetivo de cumplir con las “normas internacionales que fijan esos valores, buscamos llegar a los parámetros de las estufas más eficientes”.
Leña, pellets o híbridos
Las estufas cerradas son a leña o pellets, y en algunos casos puede usarse la combinación de ambos. “El pellet básicamente es aserrín comprimido y se utiliza en estufas que tienen un quemador distinto, una resistencia que los enciende”. Es un producto “medioambientalmente amigable”, aseguró Manci.
En general hay estufas que son para leña y otras para pellets, sin embargo “hay algunos modelos híbridos que se pueden prender a pellets y después seguir a leña, o si está funcionando a pellet se puede cambiar a leña o al revés”, éstos últimos son modelos híbridos que Magna va a desarrollar “a mediano plazo”.
Respecto a los pellets, en el mercado se consiguen de producción nacional e importados. “Viene en bolsas de 15 kilos, es un producto limpio y cómodo de almacenar” cuyo costo al momento de comprarlo es mayor al de la leña pero por su forma de consumo y por las características de las estufas “resulta en un producto competitivo”.
Las estufas a pellets tienen la ventaja que se pueden programar y apagar con apretar un botón, cosa que no ocurre con la leña que para apagarse debe consumir toda su carga.
Aumento de los costos
Consultado sobre los costos, Manci dijo que hubo una suba “sobre todo de los fletes que se multiplicaron”. También la materia prima: “Los costos de acero han subido muchísimo”, pero el problema no es de ahora sino que se generó con la pandemia. “Con la enfermedad algunas empresas disminuyeron su ritmo de producción y a menor ritmo cayó la oferta con lo cual subieron los precios”.
Respecto a los inoxidables, éstos son productos que requieren níquel que tanto Rusia como Ucrania lo producen por lo que “es muy probable que suba el precio”, estimó.
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