Con las condiciones internacionales que siguen siendo malas, esta semana podría continuar el proceso a la baja que ya lleva cinco semanas consecutivas; y en caso de haber una suba no se espera que sea de magnitud.
Esta semana se espera que en el mercado australiano de lanas se ofrezcan a la venta unos 46.200 fardos, un total que el Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL) considera “una oferta menor” a la de las primeras semanas de marzo que fueron de unos 48.000 fardos. Pero ese descenso en la oferta “es normal ya que en esta época del año el volumen empieza a disminuir”.
Lo que preocupa a los integrantes de la cadena lanera nacional y global es el proceso de caída que ha tenido el precio de la materia prima cuyo promedio la semana pasada llegó a su valor mínimo en lo que va del año, US$ 8,74 el kilo base limpia.
Sin embargo, aunque bajo, no es el precio piso de la zafra 2022/2023 que comenzó en julio del año pasado, ya que el menor registro fue de US$ 7,94 al que cayó en la segunda semana de octubre.
De cualquier forma ésta ha sido una zafra de precios deprimidos, siempre por debajo de los diez dólares. El techo alcanzado fue en la semana del 5 al 11 de febrero cuando el kilo se ubicó en US$ 9,76.
Pero desde esa valor máximo en la zafra hasta la semana pasada el precio no ha dejado de caer, acumulando cinco bajas consecutivas hasta los US$ 8,74 de la semana pasada.
Hace un año el precio de la lana estaba en US$ 10,30, o sea más de un dólar y medio arriba (US$ 1,56); en igual fecha de 2021, el promedio se ubicaba en US$ 10.00 (1,26 dólares de diferencia con el precio actual). En igual semana de marzo de 2020 (año pandemia) el promedio era de solo US$ 8,01; y en marzo 2019 (prepandemia) US$ 13 ,97.
Todos los tipos y diámetros bajaron
Volviendo al informe semanal del SUL, ése señala que las caídas de la semana pasada “afectaron los valores de todos los tipos y diámetros de lana (como se ve en el cuadro de valores al pie de la nota), siendo el sector Merino el más perjudicado”.
Los productores no convalidaron los valores a la baja y “el 20% de la lana en oferta quedó sin vender”, lo que se suma al 8% de la oferta que fue retirada antes del inicio de las ventas”.
“El mayor obstáculo que enfrentan las ventas de lana australiana en este momento continúan siendo los problemas logísticos en el puerto en Melbourne, que continúa generando dificultades financieras a los compradores e impactando negativamente en los precios de la lana”, expresa el SUL.
El elemento nuevo que se sumó para añadir temor al mercado, es la dificultad de sector financiero con la “caída en el valor de las acciones, las fluctuaciones cambiarias y la suba de tasas de interés en muchos países para combatir la inflación”.
TE PUEDE INTERESAR
