La Corona y Buenos Aires
han firmado ya la paz
y los porteños a Elío,
dejan la Banda Oriental.
Eso sí que no aceptaron
los provincianos de acá,
ni coronas, ni virreyes
por aquí van a mandar,
si lo tuvimos sitiados
casi a punto de abdicar.
Por la traición cabildante
todos deciden marchar
y seguir al jefe Artigas
que rumbo al norte se va,
hay que ver la caravana
que a su paso se ha formado,
todos dejando sus bienes
sus tierras, bueyes, arados.
La procesión de orientales
rumbo al Ayuí va rumbeando,
la columna de orientales
ya cruzó el Arroyo Grande,
“el cololo” y “el perdido”
ya fueron quedaron atrás,
el Río Negro se vadeó
por el paso Yapeyú
pa’ rumbear a Paysandú
y acampar en el “quebracho”
un churrasco si es que hubiera
y después rumbear a Salto.
Cruzado ya el río Daymán
y cortar el caudaloso
Uruguay, fue por el salto
el cruce más peligroso
acampados en Ayuí
la nación en caravana
en “la Redota” es que emana
el razón de esta cuestión
la primera independencia
es aquí donde nació.
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