Los ingenieros Alexis González y Juan Eduardo Adrover coincidieron al señalar que los cultivos de invierno perdieron potencial, pero resultaron mejor de lo que se pensó. Ahora se trabaja en el final de la cosecha y el comienzo de las siembras de verano.
La Mañana consultó al Ing. Agr. Alexis González, gerente de Dalmas Agro, y a su colega Juan Eduardo Adrover de AS Agronegocios sobre cómo impactan las últimas precipitaciones en los cultivos de invierno y de verano.
González dijo que el impacto de las lluvias fue positivo en su zona de trabajo, o sea los departamentos de Colonia, San José y el noroeste de Soriano. “Las lluvias impactaron muy bien después de un largo período sin precipitaciones que fue muy preocupante, primero para los cultivos de invierno y después nos atrasamos con la largada de la siembre de los de verano”, señaló. “La soja se sembró en seco y el maíz de primera se sembró tarde, pero con las lluvias de las últimas semanas esos cultivos empezaron a moverse. Esta agua viene muy bien para seguir recuperando perfil porque los campos habían quedado muy secos”.
“Para el momento en que estamos los cultivos vienen bien y esta lluvia suave es ideal para darle humedad”, agregó.
Consultado sobre las cosechas de invierno, González dijo que la cebada se levantó en un 80% y el trigo un 50%. “Para esos cultivos el agua llegó tarde, pero igual el rendimiento ha sido mejor de lo que esperábamos. Creímos que tendríamos una zafra de invierno desastrosa y no ha sido así, los cultivos sorprendieron para bien por rendimiento y calidad”.
En cuando an la expectativa de los de verano, el panorama mejoró y “lo que precisamos ahora es sol. El escenario ideal sería tener una semana o semana y media con buen sol para poder seguir avanzando con las cosechas y las siembras, y después lluvia otra vez”.
El Ing. Adrover observó que las lluvias han sido “bastante desparejas por zona, pero sirven a los suelos pensando en la siembra de verano”.
Ahora en la zona de Colonia y Soriano se están “cosechando cebadas y trigos, pero son cultivos que ya absorbieron agua”. Las lluvias de los últimos días son útiles porque “van a dejar humedad en el suelo que se aprovecharán con la soja. Por lo tanto, para los cultivos de invierno estas lluvias no cambian nada”.
Respecto a la cosecha de invierno dijo que queda la mitad de canola para cosechar, en cebada la cosecha es algo más del 20%, y el trigo empezó la semana pasada con solo un 4% o 5% cosechado con buenos resultados, superando largamente las malas expectativas generadas cuando las precipitaciones no llegaban
La siembra de verano no ha avanzado y básicamente trabajará con soja y maíz de segunda: “Cuando se complete la cosecha de invierno se va a sembrar enseguida para aprovechas las humedades. Ahora espero que vuelva a llover antes de fin de mes para continuar la siembra”, dijo Adrover.
La novedad la trae el girasol, cultivo del cual este año se plantará “un área pequeña”.
“Esta zona fue muy girasolera en su momento, pero no creo que este año haya un desarrollo importante porque está el miedo por la acción de la paloma y la cotorra” que causan mucho daño.
Picado de granos
González y Adrover fueron consultados sobre el picado de grano al que recurrieron algunos productores. Ambos profesionales dijeron que no fue el caso de las empresas en que trabajan pero que saben de establecimientos que apelaron a esa herramienta.
También coincidieron en señalar que es una decisión difícil que cada uno debe tomar según su situación y producción. En Colonia y San José hay muchos tambos y cuando el agua no llegaba quizá lo más sabio fue transformar esos granos en alimento animal para poder seguir trabajando y produciendo leche. Ahora la realidad cambió y los resultados de los cultivos de invierno fueron mejor a lo esperado, pero eso es algo que se ve ahora y con el diario del lunes siempre es fácil opinar sobre qué hacer o no.
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