El mercado de lanas sigue extraviado sin encontrar un valor que de alguna señal de haber encontrado el piso. Esta semana el Indicador del Mercado del Este operó el martes 31 de marzo y miércoles 1º de abril, ambos días cayó y rompió el piso de los ocho dólares por kilo base limpia.
El martes 31 el Indicador del Este cerró a US$ 8,30 luego de caer 2,8 % respecto a los US$ 8,54 de la semana anterior (diferencia U$S 0,24). El miércoles 1º la baja fue de 4,9 % hasta los US$ 7,89 (diferencia U$S 0,41).
Respecto al volumen de negocios, también fue muy bajo: la oferta total fue de 37.713 fardos, de los que sólo se comercializó el 55 %, un guarismo tan reducido que no se veían en muchos años.
Analistas indicaron que para encontrar valores tan bajos a los alcanzados esta semana hay que retroceder una década, hasta mediados de 2010, lo que da una idea de la magnitud de la baja.
Sucede que el mercado de la lana no es indiferente al efecto que el coronavirus COVID-19 ha generado en toda la actividad económica mundial, sobre todo si se tiene en cuenta que países consumidores de la fibra han cerrado sus fronteras.
En Uruguay la caída de los precios internacionales han frenado los negocios que ya se veían resentidos desde hace varias semanas. Se estima que más del 50 % de la lana está guardada en los galpones esperando un mejor momento para su comercialización.
Caída de las exportaciones
En cuanto a las exportaciones de lana, la Unión de Exportadores de Uruguay informó que en marzo la lana tuvo “la mayor caída entre los principales 20 rubros de exportación” medidos en dólares con un retroceso del 64,68 %, lo que se explica por las caídas en las compras chinas.
En marzo de 2019 las ventas de lana e hilados fueron por 3.840 toneladas, generando ingresos por US$ 26.298.726; en mayo de 2020 el volumen cayó 71,81 % hasta las 1.083 toneladas, y en dólares retrocedió 64,68 % hasta los US$ 9.288.044.
Analizados los últimos doce meses (finalizados a marzo) las exportaciones de lana medidas en dólares tuvieron un retroceso del 33,46 % y en volumen la caída fue de 32,16 % respecto a igual período anterior.
Perspectivas
El mercado de lanas no muestra indicios de recuperación, y cuando los tiene se desvanecen rápidamente por lo que es lógico pensar que continuará así por un tiempo que nadie se anima a estimar cuándo terminará. Mientras tanto los productores guardan su producción a la espera de mejores momentos.
Los productores ovinos miran ahora los ejemplares de carne, ya que el cordero pesado no ha resentido su valor, y aguardan mejores tiempos para comercializar los stocks laneros.
