Hasta el momento no se han detectado focos en estas plantas y aunque extreman los cuidados no tienen dudas que en algún momento llegue la enfermedad. Algunos productores anunciaron que no vacunarán sus animales.
Inevitablemente la gripe aviar para el sector de granja comercial es la crónica de una muerte anunciada. De esa manera lo reveló el Director Ejecutivo de la Cámara Uruguaya de Procesadores Avícolas (CUPRA) Federico Stanham. El ejecutivo sostuvo que está con el reloj a cuenta regresiva para el día que la enfermedad ingrese a las granjas comerciales. Y aunque las medidas de bioseguridad se han extremado desde que se conocieron los primeros casos, para un consultor chileno que asesora a la Cámara con mucha experiencia en gripe aviar “el principal riesgo de infección en las granjas comerciales no son las aves silvestres que puedan colarse para adentro del galpón, sino que son las personas”. Existen dudas por cómo se puede evitar grandes contagios en estas empresas en las cuales todos sin excepción deben extremar los cuidados en la desinfección de los vehículos que ingresen a estos predios, las herramientas de trabajo, la desinfección de los pies y las prendas de vestir de todos los operarios.
Los primeros casos que registró el país con aves migratorias no fue una noticia cómoda para el sector aunque sabían de antemano que la enfermedad en algún momento ingresaría al país. El estatus sanitario que presenta Uruguay es significativo y se goza de buen prestigio internacional, que responde básicamente a la transparencia en la información que se brinda a los organismos competentes. Para este tipo de casos la Organización Mundial de Salud Animal.
Como forma de anticiparse a los posibles casos desde el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca se puso el foco desde 2022 en los monitoreos de alerta temprana por sobre los tradicionales. Para ello se estableció un convenio entre esa cartera y el Ministerio de Ambiente de modo que los guardaparque de humedales y áreas protegidas donde llegan las aves migratorias estuvieran alerta. Y justamente fue en uno de estos lugares donde se detectó el primero de los casos de la enfermedad en el país.
Algunas empresas no vacunarán
Los anuncios oficiales indican que en mayo llegarían las vacunas aunque existen empresarios que tienen reparos a la hora de aplicarla a sus animales. Las dosis son gestionadas y administradas por el Ministerio de Ganadería aunque la inoculación quedará en manos de veterinarios debidamente acreditados. Dentro de los productores de gallinas ponedoras y pollos parrilleros existen empresarios que no son afines a vacunar y optaron por extremar las medidas de bioseguridad de sus establecimientos. Para ellos pesó más no descender algunos escalones el estatus sanitario que los coloca en otro escenario frente a los diferentes mercados. Caer esos niveles les implicaría dilatar mucho o cancelar durante bastante tiempo el proyecto de exportación en el cual está embarcada la Cámara.
Como sucedió con el Covid 19 las vacunas que estaban en etapa de investigación para la gripe aviar debieron ser aplicadas antes de lo previsto. Muchos países pasaron a ser productores con gripe aviar con vacunación y como consecuencia se extremaron las barreras comerciales de aquellos que realizan mayores esfuerzos para mantenerse libres de la enfermedad. Stanham explicó que siempre estas barreras sanitarias se usaron como barreras comerciales. Pero hay una preocupación mayor. Los informes que se tienen revelan que la vacuna solo cubre entre el 40% y 50% del total de la población. El ejecutivo señaló que si de un galpón con 10 mil animales solo la mitad puede inmunizarse y se mueren mil de ellas, entonces de debe sacrificar a toda esa población.
La estrategia de erradicación de la enfermedad en los casos de aves comerciales consistió en sacrificar los animales, la desinfección y si no se diseminó en un radio de 10 kilómetros se declaraba el foco como eliminado. Pero existe otro riesgo. Quienes denuncian la enfermedad. Los establecimientos más expuestos a este escenario son los que no están bajo ningún tipo de regulación. Stanham señaló que el 40% de las empresas productoras de ponedoras de huevos no están registradas y Cupra ofreció al Ministerio de Ganadería los recursos necesarios para que en una recorrida general exigirles que se registren y se ordenen.
Uno de los mega proyectos que está llevando adelante Cupra tiene relación con la exportación de carne aviar a los países más demandantes de este tipo de cortes. La gremial es la más interesada en que se logre sortear este escollo lo más sanamente y rápido posible. Para esto puso manos y recursos a la obra y le propuso al Ministerio de Ganadería un convenio que se extenderá hasta 2024 que ya se encuentra en tránsito. Entre 2021 y 2024 Crupa con la mayor participación, y las empresas que producen ponedoras de huevos, y los fazoneros habrán destinado US$ 116 mil para suministrar los kits necesarios para el desarrollo de los monitoreos para determinar la presencia de la enfermedad.
Trabajan en varios proyectos
Cupra está trabajando en el proyecto de exportación con un plan de apertura de mercados llevado adelante por el Ministerio de Ganadería. Los 20 destinos más seductores para la gremial, MGAP e INAC son los países árabes (Arabia Saudita, Emiratos Árabes y Kuwait, China (Hong Kong), Singapur, Japón, Corea, Unión Europea, Sudáfrica, Estados unidos, Chile.
En tanto otro de los proyectos en los cuales se trabaja tiene que ver con la calidad del producto que presentaron al Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) a través de Fondo de Promoción de Tecnología Agropecuaria junto con la universidad Católica e INAC denominado “Primera auditoría de calidad de carne aviar”. Se busca medir la calidad de la materia prima para saber cómo evoluciona a lo largo de la producción en las plantas hasta llegar al producto final.
Stanham señaló que otro de los trabajos que están elaborando está relacionado con el impacto de la calidad de los productos que llegan a la cadena comercial. Una de las percepciones negativas que tiene el consumidor son los problemas de calidad en las góndolas.
Actualmente se encuentran buscando financiamiento para el proyecto que desarrollará un diagnostico planta por planta para determinar qué tan lejos se está de cumplir los requisitos de los mercados internacionales. Se piensa en una consultoría para dar a conocer que deben hacer las plantas para cumplir los estándares de los mercados en cuanto a infraestructura, equipamiento, gestión y competitividad.
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