El origen del problema está en las personas que se cansan de tener conejos como mascotas y los liberan en el medio rural.
Los conejos son animales simpáticos con un aspecto de inocencia que los hacen agradables, quizá por eso donde se los exponen constituyen una atracción familiar, especialmente para los niños que siempre quieren llevarse uno como mascota. Otros animales agradables de ver son el carancho con su porte y vuelo; el zorro por su ágil, rapidez y sobre todo inteligencia que se refleja en su cara y mirada, pero sobre todo en su comportamiento.
Pero muchos animales, a pesar de ser tiernos, bonitos o simpáticos, su presencia no siempre es positiva. Ni siquiera el perro, el mejor amigo del hombre.
En España, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), expresó su preocupación, que también la es de muchos productores, por la presencia de conejos que ha causado “algún tipo de daño” en un millón de hectáreas con pérdidas cuantificadas en 800 millones de euros.
Aunque se parecen y son simpáticos como los conejos que vemos en Uruguay, se trata de animales diferentes, híbridos, una “mezcla de conejo de monte con doméstico”, es “más grande, más voraz y con mayor capacidad para procrear”.
La presencia inusual de esos animales se debe a la sequía que sufre España en estos momentos y la proximidad del verano agrava más el panorama: “Con la llegada de las altas temperaturas en verano los conejos son un vector de propagación de enfermedades que pueden derivar en graves problemas sanitarios en mascotas y humanos”, señala COAG que pide a las autoridades que se tomen “de manera urgente medidas contundentes y eficaces”.
El responsable del Área de Fauna Salvaje de COAG, Pedro Gomáriz, cuestionó la eficacia de las medidas tomadas por el Gobierno español: “En la mayoría de las zonas las medidas que se han tomado hasta el momento han resultado claramente insuficientes para reducir la sobrepoblación” de conejos híbridos, los cuales pueden reproducirse “todo el año” y “cada hembra puede tener 7 camadas” anuales “con una media de 6 crías, que en los casos más prolíficos pueden llegar a 14”.
Gomáriz sabe de lo que habla, es productor y como tal ha sufrido esta nueva plaga en sus plantaciones de limones ecológicos en Murcia, al sureste de España, más precisamente en el municipio Molina de Segura, donde se ha declarado la emergencia cinegética por plaga de conejos.
Los cultivos más afectados son los cereales, viñedos, leguminosas, olivares, árboles frutales, almendros y hortícolas al aire libre.
Javier Fatás, responsable de Medio Ambiente y Fauna Salvaje de COAG y agricultor en Zaragoza (norte de España) señaló que España se enfrenta a “una inédita plaga de conejos híbridos nunca antes vista”.
El inicio del problema, como muchas veces ocurre, es el comportamiento humano equivocado: liberar conejos en medios rurales.
“Ha habido irresponsabilidad por parte de los ciudadanos” que abandonan conejos domésticos cuando se cansan de ellos como mascota y los echan al campo, dijo Fatás; pero también irresponsabilidad “de las mismas administraciones, que han intentado moldear de forma artificial el mundo natural, permitiendo la proliferación de conejos sin control para alimentar a especies en peligro de extinción como el lince. La situación se les ha ido de las manos y ahora los que estamos pagando las consecuencias somos los agricultores y ganaderos”, subrayó.
Al daño causado a la producción se suman problemas sanitarios agravados por el calor del verano. Gomáriz advirtió que los conejos son adecuados para las garrapatas: “Las aves migratorias provenientes de África las traen y los conejos se infectan de las mismas en los humedales. A partir de ahí, alojadas en sus orejas, las distribuyen a lo largo y ancho del campo español. Ya ha habido casos de agricultores y senderistas hospitalizaciones por picaduras de las mismas
COAG definió la situación de “gravedad” y espera que “de manera urgente” se tomen medidas “contundentes y eficaces”, entre ellas el “control poblacional de los conejos” y la “indemnizaciones para los profesionales agrarios”.
Las siguientes fotografías del secretario provincial de COAG Sevilla, Ramón García, muestran los daños causados por los conejos híbridos en cultivos de Carmona (Sevilla).
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