Ante reclamos de la oposición que manifiestan que la baja es insuficiente, el subsecretario de Industrias dijo que el ente petrolero “está bien de caja, pero lo tenemos que cuidar, no podemos cometer excesos” porque “ya sabemos lo que ocurre” si eso pasa.
A partir del 1° de octubre el precio de la nafta bajará tres pesos pasando a costar $ 74,88, se mantiene el precio del gasoil y supergas. El Gobierno explicó que la baja del precio “refleja la evolución del mercado internacional”.
La rebaja es de $ 3 respecto al precio actual, y en el acumulado de dos meses es de $ 6 al pasar de $ 80,88 a $ 74,88 (-7,5%).
El gasoil mantendrá el precio, a pesar de que el precio de paridad de importación mostraba que debería tener un aumento de $ 1.
“La medida se fundamenta en el compromiso del Ejecutivo en apoyo a la recuperación económica y con la finalidad de minimizar el impacto de la escalada de precios de este recurso energético en las cadenas productivas”, publicó Presidencia en su página web.
El subsecretario de Industria, Walter Verri, dijo en rueda de prensa que este es la segunda baja consecutiva, y que “lo vamos a seguir haciendo” si continúa siendo favorable la evolución del mercado internacional.
La decisión del Ejecutivo “reivindica el nuevo sistema de fijación de precios del combustible, en 30 días estamos anunciando dos bajas consecutivas en el precio del combustible”.
Consultado por las objeciones de legisladores del Frente Amplio que indican que no es suficiente la rebaja, el jerarca dijo desconocer la forma de cálculo que usa la oposición, “pero me parece bastante irracional”. Los nuevos valores surgen de “un cálculo hecho por Ursea, no es caprichoso, es un calculo técnico hecho por una unidad reguladora creada para eso y que ha sido fortalecida”.
Además “es el mismo parámetro que hemos usados durante todos estos meses, tanto cuando tuvo que ser al alza como ahora que tiene que bajar. Esto no es un tema de voluntarismo, sino de administración seria y responsable”.
El Gobierno es “transparente a la hora de fijar precios para los combustibles”, agregó.
Asimismo, cuestionó al Frente Amplio porque no dicen cómo calculan ellos para opinar que la baja debería ser mayor. “Antes no sabíamos como se calculaban los precios de los combustibles, no teníamos esta referencia y Ancap tuvo ganancias extraordinarias de más de US$ 900 millones por varios años, que salían de los bolsillos de los contribuyentes. Acá no tratamos de favorecer Ancap, sino que tratamos que sea competitiva aplicando un precio de paridad de importación tal cual fuera un importador virtual”.
Añadió que “Ancap está bien de caja, pero la tenemos que cuidar, no podemos cometer excesos. Ya sabemos lo que ocurre cuando cometemos excesos con las empresas públicas” como cuando “se debió capitalizar Ancap porque estaba al borde de la quiebra”, recordó en referencia a la sesión parlamentaria a comienzos de 2016 cuando Verri era diputado, y se votaron US$ 900 millones para sacar la empresa de la quiebra. “No es un tema para tratar con liviandad”, apuntó.
Consultado sobre el precio del gasoil que afecta directamente al sector productivo, Verri dijo que “desde hace 2 ajustes se mantiene el mismo precio aunque en esas dos oportunidades correspondería un aumento, por lo tanto el Gobierno está haciendo algo”.
Los precios que regirán a partir del 1° de octubre
Nafta Super 95, $ 74,88.
Nafta Premium, $ 77,09.
Gasoil, $ 75,30.
Supergas, $ 63,35 el kilo
TE PUEDE INTERESAR
