El senador del Frente Amplio e integrante de la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda Gustavo González evaluó el avance del tratamiento del proyecto de Ley de Presupuesto en el Senado y sostuvo que las comparecencias de las distintas delegaciones han reflejado “la compleja situación del Estado uruguayo”, con reclamos “absolutamente legítimos” de los organismos públicos y de la sociedad civil.
González, que pertenece al Partido Socialista, afirmó en declaraciones a La Mañana que en esta etapa el trabajo de la comisión se centra en escuchar y analizar las demandas antes de definir posibles reasignaciones. “Han hecho reclamos y todos son absolutamente legítimos. Nos corresponderá ver en qué medida se puede reasignar parte del Presupuesto a algunos rubros que entendamos que son los fundamentales”, señaló.
El legislador subrayó que su prioridad personal está puesta en la educación y la Universidad de la República. A este respecto sostuvo: “Creo que la Universidad y la educación tienen que ser clave. Todo lo que podamos, pero sin generar expectativas de que se pueda dar todo lo que se ha pedido. La idea es sacar el Presupuesto mejor de lo que vino de Diputados”.
Consultado sobre las fuentes de donde podrían provenir las reasignaciones, respondió que el tema aún no fue abordado en profundidad. “Todavía no lo estudiamos. Esto lleva un proceso, por algo se da un mes al Senado para el tratamiento de la Ley de Presupuesto. Lo primero es escuchar a los ministerios, tomar nota, después escuchar a las organizaciones y a partir de eso reunirse y discutir las reasignaciones”, explicó. González dijo que prefiere “no aventurar cuestiones que puedan generar distorsiones” antes de tener un panorama completo. “Quiero estudiarlo tranquilo, en forma responsable y tengo el ánimo de aumentar todo lo que se pueda en la universidad y en la educación”, aseguró.
“El Estado en una situación muy grave”
El legislador describió un panorama general de los reclamos que han llegado a la Comisión y consideró que los problemas estructurales del Estado reflejan las consecuencias del pasado. “Hemos tomado un Estado donde hubo un modelo neoliberal anterior que lo golpeó duramente. Hoy en día los reclamos son gigantescos por parte de cada uno de los organismos del Estado. Nos dicen que faltan vacantes, que hay problemas edilicios. Todo eso es el país real, el que marca a la gente”, expresó. Según González, esa realidad también se manifiesta en las comparecencias a la Comisión de las organizaciones de la sociedad civil, que a su juicio han sido especialmente relevantes. “La mayoría de ellas son muy serias, vienen todas muy bien fundamentadas, y yo respeto mucho los reclamos de la gente cuando se hacen con fundamentos”, afirmó. Para el senador del FA, “el Estado está en una situación muy grave y muy compleja”.
Reforma tributaria
Uno de los temas más discutidos en el marco presupuestal ha sido la incorporación de nuevos tributos, como el IVA a las compras por internet, lo que reabrió el debate sobre el sistema impositivo en su conjunto. Para González, el país necesita “una reforma tributaria total” que apunte a una mayor equidad.
“Yo estoy de acuerdo con que el país necesita una reforma tributaria total. Fui uno de los senadores que apoyó la propuesta del movimiento sindical respecto a aplicar un 1% de impuesto a los que tienen mayor riqueza”, dijo, y acotó: “El Poder Ejecutivo ha entendido que hoy en día no están las condiciones, que no es lo mejor eso. Yo sigo considerando que sí”.
El parlamentario argumentó que Uruguay tiene un sistema con “muchas exoneraciones al capital” que deberían revisarse. “Habrá tiempo para en la próxima Rendición de Cuentas [en 2026] ver todo eso. Hay muchas exoneraciones al capital en este país, y habrá que estudiarlo. Una reforma tributaria va a ser fundamental. No hay Estado que subsista sin impuestos. Esto es una realidad objetiva y en el mundo”, remarcó.
González recordó que el impuesto al patrimonio, una de las herramientas que considera prioritarias para fortalecer la recaudación, tiene una larga tradición en Uruguay. “Los primeros en ponerlo fueron el Partido Nacional, y luego lo reafirmó el gobierno de Pacheco Areco, del Partido Colorado. Me tomé el esfuerzo de leer las actas de aquel momento: fue toda una conmoción, porque se iba a grabar a las grandes fortunas. Y no fue el Partido Comunista ni el Partido Socialista quienes lo plantearon, fueron el Partido Nacional y el Partido Colorado. ¿Por qué? Porque había una gran crisis en la década del 60 en Uruguay”, señaló.
En ese sentido, sostuvo que su intención es promover una revisión profunda del sistema tributario y de los beneficios fiscales. “Estoy a favor de una reforma tributaria que se estudie todo. Me voy a ocupar el año que viene de tratar de averiguar todo eso, con informes que voy a solicitar, y veremos qué se puede hacer”, adelantó.
Sobre la situación de la distribución de la riqueza entiende que “el problema es que hasta el momento los únicos beneficiados han sido la gente que tiene muchísimo dinero en este país, y hay una gran cantidad de gente con problemas. Y el Frente Amplio vino al gobierno para cambiar”.
González opinó que la discusión sobre los cambios tributarios deberá retomarse en futuras instancias como en las leyes de Rendición de Cuentas, cuando haya una visión más clara del desempeño económico de este año. “Creo que este tipo de reformas se puede comenzar a tratar en las próximas Rendiciones de Cuentas, porque veremos cómo va el país”, dijo. “Hoy no se puede hacer, ya que agarramos una situación muy compleja desde el punto de vista económico. Además, somos Uruguay, no somos Alemania ni Suecia. Somos un país con dificultades”, añadió.
Vivienda y déficit habitacional
Gustavo González fue secretario general de la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam) durante cuatro períodos y perteneció a la misma por 44 años, antes de ser electo legislador. La Mañana consultó su opinión por el tratamiento presupuestal en materia de vivienda. Reconoció que al comienzo tuvo “preocupación” por los números que llegaron del Presupuesto, aunque luego valoró positivamente la información brindada por el Ministerio de Vivienda. “Tuve una muy buena reunión con la ministra Tamara Paseyro y apareció un fideicomiso importante que podría, según me planteó ella, resolver en gran parte la primera partida del presupuesto que se le había dado”, indicó.
No obstante, advirtió que “en vivienda nunca alcanza”, y recordó que el país arrastra “un déficit habitacional crónico que no se levanta”. Por esa razón, insistió en la necesidad de “recrear el Fondo Nacional de Vivienda”, dado que, en su visión, en el Presupuesto lo que se destina a vivienda termina “compitiendo” con lo destinado a educación y la salud.
Consultado sobre las políticas de asentamientos y realojos, González expresó su expectativa de que se logren avances durante el período, aunque advierte que “el problema de los realojos es que si la ciudad sigue extendiéndose se hace cada vez más caro para el conjunto de la sociedad”.
Relató que estuvo en diálogo con el intendente de Soriano, Guillermo Besozzi, quien le explicó que el costo per cápita de un realojo, o sea sacar a las personas de un asentamiento y llevarlas a un terreno donde se edifique todo de cero, ronda los 75.000 dólares. “Es muchísima plata. ¿Sabe por qué? Porque hay que llevar todos los servicios. Ese es el problema de nuestro país: tenemos que ganar el centro de la ciudad, los lugares donde están los servicios”, explicó.
González agregó que este tema ha sido ampliamente analizado por el “viviendismo latinoamericano” y que implicará “un esfuerzo fiscal importante”. En ese marco, adelantó que se encuentra trabajando en un proyecto de ley para crear “un verdadero” Fondo Nacional de Vivienda, que podría presentarse a comienzos del próximo año.
“El Fondo Nacional de Vivienda tiene un título que dice existir, pero hoy se estructura con base en la partida presupuestaria y la recaudación de los préstamos adquiridos. Con eso se alcanza aproximadamente al 0,5% del PIB, y necesitamos al menos un punto y medio para tener una política que ataque todos los problemas de vivienda”, sostuvo.
Para financiar esa política, propuso incrementar en 0,25% el impuesto al patrimonio, lo que, según dijo, permitiría disponer de “una partida de dinero muy importante” para el Fondo. “Solo así se podrá sostener una estrategia de vivienda de largo plazo que atienda a todas las realidades del país”, concluyó.
